Recientemente se llevó a cabo en la ciudad de La Victoria, municipio Ribas, el V Encuentro Nacional de «Burras y Burriquitas», alegrando a toda la comunidad ribense con cada uno de sus bailes propios de la cultura del venezolano.
Las burras caminaron por las principales calles y avenidas de La Victoria contagiando de alegría a los ciudadanos
El encuentro contó con la participación de 150 bailadores y bailadoras, provenientes de por los menos nueve estados, entre los que destacan La Guaira, Miranda, Apure, Yaracuy, Lara, Distrito Capital, Carabobo y por supuesto del estado Aragua.
Todos ellos al ritmo de la música y con sus respectivas burras diseñadas y confeccionadas por ellos mismos, hicieron un recorrido por las principales calles de la Ciudad de La Juventud, contagiando de alegría a los transeúntes, quienes no dejaron pasar la oportunidad de bailar en compañía de esta manifestación cultural.
A la celebración además se le unieron autoridades municipales, quienes estuvieron presentes durante todo el recorrido iniciado en la Escuela de Artes y Oficios Carmen Pilar Fernández, hasta su llegada a la Plaza Campo Elías del centro de la ciudad.
Con respecto a la actividad, la profesora Norca Castro, del Colectivo de Burras La Mora y organizadora del encuentro, informó que esta tradición la llevan a cabo desde este colectivo, pues el mismo está encargado desde hace dos años de salvaguardar el Patrimonio Nacional de Burras.
«En este recorrido lleno de baile y de tradiciones participaron niñas, niños, adolescentes, adultos mayores, contribuyendo a la reactivación de los valores de los pueblos, al fortalecimiento de nuestra identidad nacional y a su vez brindando espacios de esparcimiento a toda la colectividad», manifestó Castro.
Para finalizar, la señora Castro resaltó que los encuentros permiten mostrar la diversidad cultural que hay en todos los estados de Venezuela, dentro del marco tradicional, conservando la vestimenta como el sombrero, las crinejas, el maquillaje, las alpargatas, la blusa, las faldas, las piernas falsas, el rabo y la burra.
DANIEL MELLADO | elsiglo
