El conflicto entre gremios y Gobierno Nacional se mantiene aún sin establecer acuerdos claros con relación a las respuestas que el Ejecutivo debe dar a este sector, que se siente agraviado en sus derechos, como lo es el de los trabajadores de la educación universitaria.
Es por ello que docentes, obreros y autoridades de la Universidad de Carabobo, núcleo Aragua, buscan establecer un plan de contingencia a fin de que la gesta reivindicativa de dichos trabajadores no repercuta en el abandono y paralización total de dicha casa de estudios.
El amor, vocación y compromiso es quizás lo que a muchos de los empleados de la comunidad universitaria, los mantienen sin abandonar sus labores definitivamente, entendiendo que ante la justa que plantean sus representantes gremiales, los estudiantes principal objetivo del alma máter, no tienen culpa en los desagravios y deterioro del sistema, del que incluso son víctimas también.
En este orden de ideas, Jimmy García, secretario de Actas y Correspondencia del Sindicato de Trabajadores de la UC, núcleo Aragua, indicó que desde el movimiento que representa se establecen una serie de asambleas y reuniones a fin de establecer los mecanismos de lucha, toda vez que de parte del ministerio universitario, así como de la Oficina Planificación del Sector Universitario (OPSU), no hay acuerdos claros ante la querella que los empleados mantienen.
“La situación de lucha que actualmente mantenemos es como ya se sabe a raíz de la situación económica en la que se encuentra el país actualmente, donde el sueldo de los trabajadores del sector universitario es extremadamente bajo, por lo que en lo sucesivo estaremos informando sobre las acciones a tomar en vista a la ausencia de respuestas por parte del Ministerio y la OPSU”.
García expresó que desde toda la comunidad ucista se proponen realizar un plan de contingencia que permita atender los diferentes espacios de la UC, esto sin abandonar la lucha gremial.
“Actualmente vamos a realizar un periodo de contingencia para hacer que los espacios de universidad no queden vacíos, para que tanto los trabajadores como los estudiantes puedan cumplir con sus funciones internamente, sin perturbar la lucha social por nuestras reivindicaciones”.
No obstante, el panorama general de la UC no es distinto al de la mayoría de las universidades, que desde los periodos pasados también viene reclamando un presupuesto justo para sus gestiones operativas, por lo que áreas como comedor, transporte, becas estudiantiles, mantenimiento de áreas verdes, seguridad interna, entre otros, son esos factores a los que la institución ya no puede garantizar.
En el caso específico de sueldos y salarios unidos al incumplimiento de las cláusulas de la contratación colectiva, ha vulnerado los derechos de los trabajadores de este sector al punto de que hoy devengan el salario más bajo en la historia.
En este sentido, Israel Sánchez, secretario provisional de la asociación de empleados dijo, “el día lunes después de que regresamos de nuestro periodo vacacional, realizamos la primera asamblea de trabajadores y a estos le manifestamos que la situación ya aquí es insostenible, pues hay personal que cobra quincenal 25 mil bolívares, ya eso no representa absolutamente nada, con eso no se puede compra ni medio kilo de queso”.
“Muchos en la asamblea nos decían que viven en El Limón, es decir que tienen que pagar dos pasajes para llegar hasta aquí, ya que no hay transporte aquí funcionando que al menos los busque en el Terminal, sólo hay un autobús para toda la comunidad, pues los demás están dañados, es por ello que nosotros llegamos a la conclusión de que no podemos cumplir con la jornada diaria toda la semana, en pasaje se iría más de lo que cobramos”.
“También mantenemos igualmente la tesis de no cerrar la universidad, ya que con ello no hacemos nada, pues en ese sentido los perjudicados serían los estudiantes y ellos son la base fundamental de la misma, por eso queremos mantener la universidad abierta en la medida de nuestras posibilidades, claro está, tampoco es que vamos a pagar para trabajar, que es en realidad lo que estamos haciendo”.
Finalmente el vocero sindical dijo que en los últimos acuerdos establecidos con delegados que a su juicio no representan la mayoría gremial, sino que a conveniencia del oficialismo fueron elegidos, estos establecieron los arreglos donde de igual manera se siguió perjudicando al profesional, indicó que en el panorama de incertidumbre que se avizora para la casa de estudios, es probable el cierre técnico que de hecho ya prácticamente se ha activado.
JOSÉ LUIS BLANCO | elsiglo
