Estudiantes de Hong Kong muestran apoyo a las protestas con cadenas humanas

Estudiantes uniformados de un centenar de escuelas de Hong Kong formaron esta mañana cadenas humanas para apoyar el actual movimiento de protesta antigubernamental, del que se cumplen tres meses.

A las 07.00 hora local , adolescentes de al menos un centenar de colegios de diferentes partes de Hong Kong como la isla homónima, la zona de Kowloon o los Nuevos Territorios unieron sus manos a las afueras de las puertas de sus centros educativos.

Los jóvenes entonaron eslóganes como «No hay revuelta, sino tiranía» o «¡Ánimo, hongkoneses!», y mostraron pancartas con mensajes que incluían las cinco demandas populares de las protestas.

Estas incluyen una investigación independiente sobre problemas como la supuesta brutalidad policial contra los manifestantes desde que el movimiento comenzó, el pasado 9 de junio, día en el que un millón de personas tomaron las calles en repulsa a un polémico proyecto de ley de extradición que permitiría la entrega de fugitivos a otras jurisdicciones como la China continental.

Algunas de las cadenas humanas se extendieron más de un kilómetro, con estudiantes de una escuela uniéndose con los de otra cercana; en Hong Kong, es común que las escuelas estén agrupadas en un área determinada.

También participaron antiguos alumnos y padres de los estudiantes.

Al no estar acostumbrados a unir sus manos con el sexo opuesto, muchos alumnos se sobrepusieron a la timidez sujetando las manos de un peluche o los extremos de un bolígrafo o de un paraguas, como forma alternativa de «encadenarse» a los demás.

Lee, una adolescente de la escuela de monjas Maryknoll, de Kowloon, aseguró en declaraciones a Cable TV: «El futuro de Hong Kong nos pertenece. Si no salimos nosotros, nadie nos ayudará«.

El movimiento antigubernamental ha entrado en su decimocuarta semana consecutiva y no muestra signos de calmarse, a pesar de que la jefa del Gobierno local, Carrie Lam, anunció la retirada formal del proyecto de ley de extradición el pasado 4 de septiembre.

Los manifestantes y opositores aseguran que ese gesto es «demasiado poco y demasiado tarde».

EFE