La ofensiva tuvo lugar en la base aérea de Jmeimim que controla la Fuerza Aérea rusa.
Los militares de Rusia desplegados en la base aérea Jmeimim han repelido con éxito un ataque contra esa instalación, según ha informado el jefe del Centro ruso para la Reconciliación de las Partes Beligerantes en Siria, el general mayor Víktor Kupchishin.
Ese alto mando ruso ha señalado que los responsables fueron dos grupos extremistas que se encontraban en la zona de distensión de Idlib, desde donde lanzaron 12 cohetes a las 15:15 de este 8 de mayo.
Las tropas rusas contaron con la ayuda de las fuerzas gubernamentales sirias para destruir las posiciones donde se encontraban los extremistas que realizaron esa ofensiva.
Kupchishin ha detallado que «todos los cohetes fueron interceptados por las eficaces defensas antiaéreas de la base Jmeimim» y ha confirmado que «no ha habido víctimas ni se han producido daños materiales».
No es la primera vez que atacan esa base aérea rusa esta semana: varios militantes dispararon 36 misiles en dos ofensivas con múltiples lanzadores de cohetes contra ese recinto el pasado 6 de mayo.
Los puntos de origen de esos proyectiles fueron detectados y eliminados gracias a la cooperación entre la Aviación rusa y la artillería del Gobierno sirio.