Las madres fallecidas también fueron recordadas en su día y es que el Cementerio Metropolitano, lució más concurrido que un domingo habitual. Los deudos que aprovecharon la ocasión para extender un llamado a la autoridad encargada del mantenimiento del camposanto.
Entre esas voces que se alzaron, para pedir atención se encuentra Ofelia de Alar, quien asiste mensualmente a llevar flores a su madre y dos hijos muertos a manos de la delincuencia, ella solicita mayor atención especialmente en lo referente a la falta de agua, para la limpieza de las tumbas .
“Desde hace varios meses no hay agua en el cementerio, cuando me traen vengo desde Palo Negro, cargando con bidones del vital líquido, cuando me traslado en transporte público, cargo los tobos en la floristerías cercanas”.
La familia Hernández Gutiérrez, también se hizo presente en el camposanto para recordar a la matrona de la casa que lleva varios años descansando en la paz del señor. Ellos reclamaron por la falta de energía eléctrica.
“Tradicionalmente este día se celebraba un misa a la entrada del cementerio, este año no hubo el acto religioso, por falta de energía eléctrica, problema que lleva ya varios meses”, acotó José Chirinos.
Flores por las nubes
El alto precio de las flores, fue otro de las cosas que alarmó a los dolientes. Ya en términos del cono monetario que se avecina los comerciantes ofertaban ramos desde mil quinientos hasta cuatro mil bolívares o lo que igual a millón y medio de bolívares y cuatro millones de bolívares, respectivamente.
Los dolientes que madrugaron lograron adquirir ramos en cuatrocientos mil bolívares, en estos se dejaban ver especies florales como; tulipanes, pompones y aster. Según comentó el comerciante Julio Silva.
En su caso ofertó entre millón y medio y dos millones de bolívares frondosos arreglos con rosas, girasoles, alpinias, crisantemos y mini pompones.
“Tratamos de golpear los menos posible el bolsillo de los clientes, pero es bien difícil, el precio del paquete de rosas al mayor no cuesta 7 millones de bolívares. Los distribuidores alegan que se han encarecido mucho por el gasto que implica trasladar esta especie desde Colombia o parte de la región andina, hasta el centro del país”, acotó Silva.
El siglo /
