El gremio de comerciantes del municipio Costa de Oro, en el estado Aragua, informaron que este asueto por la Semana Santa les cayó como anillo al dedo, ya que no sólo lograron reforzar su fe al disfrutar de un tiempo de fervor católico, luego de dos años, sino que además impulsaron sus comercializaciones, plantándose nuevamente como una potencia en turismo y economía, tanto en el estado Aragua, como en todo el país.
Y es que más allá de la carga religiosa y de valores culturales, la Semana Mayor es una época donde se impulsa el sector económico y los pilares que en conjunto ayudan a generar comunidad y más luego de un confinamiento, donde los turistas se encontraban un poco alejados de este paraíso terrenal al que nuevamente volvieron, en medio de una nueva realidad y no menos que para celebrar una de las épocas más esperadas para el disfrute en familia.
Con respecto al tema, la presidenta de la Cámara de Comercio del municipio Costa de Oro, Normadia Dávila, durante un encuentro con el equipo reporteril del diario elsiglo mencionó su alegría al nuevamente volver a recibir a los turistas en una época tan icónica para los ciudadanos, quienes buscan distracción en esta parte del Mar Caribe.
«Estoy bastante contenta que nos estamos afianzando como un municipio potencia en turismo y economía. Quizás los temporadistas no comenzaron a llegar desde mucho antes de la Semana Santa como tal, como años anteriores; sin embargo desde el jueves el volumen de personas llegando a nuestras costas subió bastante, lo que representa para nosotros avances en todos los sentidos y más cuando nos estamos reactivando», explicó la autoridad.
De la misma forma, Dávila agregó que todo el municipio se encontraba brindando los mejores servicios a los temporadistas. «Estamos trabajando con servicios óptimos, de calidad, para que los turistas se sientan nuevamente como en su casa. Todas las posadas están laborando, los restaurantes, los hoteles, los traslados y sobre todo nuestra gente, que está presta y dispuesta a hacer de los visitantes uno más de su familia, como estamos acostumbrados».
HOTELES Y POSADAS SIRVIENDO CON EL SELLO DE CALIDAD
Para nadie es un secreto, que ir a uno de estos edenes en la tierra, representa sacrificios, ya que son sitios, en los que como reza el argot popular, «quien llega, no se quiere ir», es por ello que los encargados de los hoteles y posadas de esta parte de la entidad aragüeña, pusieron en marcha estrategias que más que atraer al turista, «acaricien su bolsillo», factor importante en todo este panorama.
La señora Nerema Ríos, representante de una de las posadas en el sector El Malecón, mencionó: «Desde Carnaval, que logramos comenzar a trabajar en forma, decidimos fortalecer nuestros servicios, marcar la diferencia, pero desde el corazón, con servicios de calidad y que mantengan costos los más cerca de la realidad de las familias, pues nosotros también somos una. La empatía fue nuestra bandera».
Con respecto a las reservas, Ríos agregó que las mismas comenzaron una vez terminaron las fiestas carnestolendas. «De verdad que al terminar los días de Carnaval, comenzaron a llegar las reservas, es tanto, que desde el jueves comenzaron a llegar y tengo todo reservado por Semana Santa y es algo que nos alegra, porque estamos viendo nuestro sacrificio dar frutos, no sólo por recibir ganancia, sino que con la misma estamos laborando para darle mejores servicios y además vemos como nuestro municipio de a poco vuelve a florecer».
En concordancia con la opinión anterior, Manuel Acasio, encargado de otra posada en las cercanías de El Playón agregó: «Esta Semana Santa 2022, los temporadistas comenzaron a llegar a nuestras instalaciones a partir del Jueves Santo, llenándonos casi por completo el sitio, lo que representa que hay receptividad por parte de los turistas al elegir Ocumare, como siempre lo han hecho en esta época tan esperada».
Siendo así, que las habitaciones se podían conseguir previa reserva desde los 30$ hasta los 70$, dependiendo del sitio y de los servicios, que para el momento requiera el turista. Todos estos lugares de descaso, en su mayoría contaban con las comidas, aires acondicionado, Internet y TV.
UNA VEZ CON EL SOL Y LA ARENA EN EL CUERPO
Los temporadistas, quienes ya se encontraban ubicados en las posadas, en hoteles o los que simplemente llegaron de ida, por vuelta, no tardaron en hacer uso de los atractivos ubicados en la orilla del mar, como los restaurantes y el servicio de toldos, el cual adicionalmente contaba con atención personalizada.
Sebastián Bogado, encargado de una buena porción de los toldos, expresó: «Les estamos ofreciendo al turista, el servicio de un paraguas, con mesa y cuatro sillas por 10$, adicionalmente les ofrecemos la atención al llevarle las comidas a la mesa y las bebidas, de forma de que su estancia sea completamente placentera».
Asimismo, destacó que las recepciones de toldos estaban a la orden del día, ya que los ciudadanos estaban haciendo el sacrificio. «Todos están cancelando lo que se les demanda, pues vienen a distraerse y lo menos que quieren es tener que realizar tareas que vayan más allá de bañarse en la playa y disfrutar con su familia».
Por su parte, Lismey Castillo, quien labora en un restaurant ubicado en la Bahía de Cata aseveró: «De verdad estoy sorprendido por toda la demanda que estamos teniendo, siento que han superado nuestras expectativas. Las personas siguen buscando su pescado, patacones y sus bebidas. Ahorita también nos ayuda, los full day, nada más ahorita sacamos 80 platos con los almuerzos tradicionales de pescado, patacones y ensalada».
Siguiendo con la senda investigativa, se conoció de primera mano, que los platos mantenían precios que iban desde los 6$, los cuales estaban integrados por un pescado frito, ensalada y patacones. «El más económico de los platos y el más llevado, es el de pargo blanco, sale en 6$ o al cambio y también las personas llevan, pero en menos cantidad, el ceviche de mero y los camarones rebosados. Mantenemos precios de verdad ajustados, porque nos gusta que las personas coman lo tradicional de las costas».
NAVEGAR TAMBIÉN FUE OPCIÓN PARA LOS TURISTAS
Los temporadistas quienes son un poco más aventureros, tampoco dejaron pasar la oportunidad de conocer todas las playas del litoral aragüeño y que mejor forma que navegando de la mano de los lancheros de Ocumare, es por ello que con bolsos, toallas y trajes de baño no titubearon para zarpar desde el muelle de La Boca.
Con respecto al tema, Erika Bulmera, representante del sector Pesquero y vocera de Turipesca Simón Bolívar, durante su encuentro con el equipo reporteril, señaló que desde esta trinchera del municipio Costa de Oro se encontraban laborando conforme a lo establecido, en un trabajo arduo que ha conseguido la demanda de los servicios de navegación en gran cantidad.
«Los viajes que están pidiendo las personas y que estamos ofreciendo, son al Eje Costero del estado Aragua, con un costo de 10$ por persona, que se desglosan en ida y vuelta, garantizando así una atención personalizada, es decir, el mismo lanchero que los lleva, es el que los busca. Contamos con 26 lanchas en óptimo estado, para hacer sentir a nuestros turistas especiales viajando a nuestras playas».
Del mismo modo, la ocumareña destacó que hasta el viernes en la mañana habían trasladado 500 personas hacia La Ciénaga, como uno de los destinos preferidos por las familias.
«Hacia tiempo que no había esta cantidad de personas, por eso estamos tratando de hacer todo bien, tratando bien al turista. A veces se nos escapan un poco las cosas de las manos, pero poco a poco vamos saliendo adelante. Ya los lancheros estamos organizados, trabajando en orden, hacemos el control de zarpe y aquí se les da una atención de calidad, donde la seguridad y el buen trato son las banderas», puntualizó.
En resumidas cuentas, el municipio Costa de Oro sigue fortaleciéndose como potencia turística en Venezuela y por consiguiente el desarrollo y la resiliencia es un sinónimo que poco a poco se va ajustando más a sus pobladores.
