Rusia alertó hoy sobre la necesidad de formar una «arquitectura de seguridad» única para Asia y el Pacífico y sobre los peligros de crear «líneas divisorias» en esta región, tras la firma del acuerdo AUKUS entre Estados Unidos, Australia y el Reino Unido.
«Consideramos contraproducentes los intentos de trazar nuevas líneas divisorias en la región de Asia y el Pacífico», declaró el ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, en una rueda de prensa con su homólogo vietnamita, Bui Thanh Son.
El jefe de la diplomacia rusa señaló que Moscú y Hanoi comparten la opinión sobre «la necesidad de formar en la región de Asia y el Pacífico una arquitectura de seguridad equitativa e indivisible acorde a la realidad actual, que se sustente sobre los principios universales del derecho internacional».
Estados Unidos, Australia y el Reino Unido anunciaron el 15 de septiembre un ambicioso pacto de defensa destinado a plantar cara a China en el Indopacífico; y que incluirá el desarrollo de submarinos nucleares para los australianos.
EL PACTO AUKUS
El pacto, llamado AUKUS por las iniciales en inglés de los tres países anglosajones; tiene como objetivo reforzar la cooperación trilateral en tecnologías avanzadas de defensa, como inteligencia artificial, sistemas submarinos y vigilancia de larga distancia.
China reaccionó inmediatamente y acusó a Washington; Londres y Canberra de «socavar la estabilidad y la paz regional» y los esfuerzos internacionales por la no proliferación nuclear.
Francia, por su parte, no ocultó su malestar tras la ruptura de un contrato de venta de submarinos franceses a Australia; que fueron sustituidos por submarinos estadounidenses en virtud de este acuerdo, hecho que califico de «traición» y «una puñalada por la espalda».