Piden sanciones a quienes se nieguen a aceptar los billetes de 100 bolívares

William Borges, un usuario del transporte público del municipio Santiago Mariño, se acercó a la redacción del matutino de los valles de Aragua, denunciando que los camioneteros de la Unión de Conductores Turmero- Maracay se niegan rotundamente a recibir el billete de 100 bolívares, lo cual, cuya actitud se convierte en un atropello y humillación al ciudadano de a pie.

William Borges dijo que los conductores juegan a una explosión social
William Borges dijo que los conductores juegan a una explosión social

«No entiendo el comportamiento de los conductores de esas unidades con las personas que a diario utilizan esos vehículos para trasladarse a sus sitios de trabajo o estudios, así como también a quienes se dirigen a realizar sus diligencias personales», dijo.

El Gobierno, de espalda a los intereses del pueblo soberano, autorizó un aumento desproporcional, e incluso supera el sueldo mínimo que gana un trabajador, y en la Gaceta Oficial, refrendada por el Ministerio de Transporte y el sector que exigía ese aumento, no se les prohíbe cobrar el pasaje con billetes de 100 bolívares.

Ante esa aberrante decisión, los pasajeros, en una actitud de molestia, reclaman tal situación y los conductores, así como los colectores se lavaron las manos diciendo que la medida arbitraria era impuesta por los directivos de la Unión de Conductores Turmero-Maracay.

«Como usuario afectado con esa imposición que golpea al ciudadano común, me preguntó lo siguiente: ¿Dónde están las autoridades oficiales?».

Por tal motivo, «les hago un llamado a la alcaldesa del municipio Mariño, Joana Sánchez, así como al gobernador Rodolfo Marco Torres y al mismo presidente de la República Nicolás Maduro, para que metan en cintura a los transportistas y les apliquen sanciones severas por menospreciar nuestro cono monetario», dijo.

Si no actúan con mano dura y se muestran complacientes, se estaría fomentando un enfrentamiento entre pasajeros y transportistas. La gente está cansada del atropello, expresó el denunciante.

Finalizó diciendo que los gobiernos no pueden estar de espaldas al pueblo, oír sus planteamientos, buscar soluciones y corregir las imperfecciones en los servicios públicos.

El asunto se está cocinando en una «olla de presión», y en cualquier momento puede estallar un conflicto, evitemos la violencia y busquemos soluciones al pueblo que usa a diario las camionetas de transporte público, afirmó el denunciante.

LUIS ANTONIO QUINTERO |elsiglo
foto | RAFAEL SALGUERO