Barrio La Paz está cuesta arriba

Los habitantes del barrio La Paz de San Mateo, municipio Bolívar, acumulan un nuevo año lleno de fallas en los servicios básicos y delincuencia desatada en sus espacios, así lo denunciaron afectados, quienes aseguraron ver cada vez más alejadas mejoras en su calidad de vida

Y es que según los denunciantes, desde hace más de 10 años claman por ayuda gubernamental, sin embargo, poco o nada han conseguido, pese a los múltiples llamados de atención, que han ido desde cartas, hasta denuncias a través de las conocidas redes sociales.


Las fallas en el servicio de agua potable se agudizan cada vez más

En este sentido, los vecinos indican que con el pasar del tiempo cada vez son más deficientes los principales servicios públicos, siendo uno de los que más los aquejan, la intermitente distribución de agua por tuberías, la cual llega una vez a la semana y si están de suerte, puede que hasta dos.

«Aquí vivimos con un hilo de agua cada vez que les dé la gana a los de Hidrocentro de colocarla, de lo contrario debemos pegar mangueras en las tomas de aguas cercanas para poder conseguir un poco del vital líquido, por lo menos para hacer los quehaceres», expresó Juana Landaeta.

En concordancia con Landaeta, Marisa Azócar aseveró que este no sería el único inconveniente presente en la barrida, pues el nulo servicio de aseo urbano cada vez los golpea más de frente. «Vivimos con basura por todos lados y los malos olores son tantos, que en oportunidades debemos sacar las bolsas y colocarlas en la quebrada Pipe, para alejar un poco la putrefacción y los animales que esta trae», dijo Azócar.

Asimismo, sentarse en frente de sus viviendas o reunirse en los porches, ha quedado en el olvido de los moradores, pues las fallas en el sistema de alumbrado público, ha traído como consecuencia que los delincuentes permanezcan constantemente al acecho.

«Esta es una zona tranquila, pero con la penumbra que vivimos en las noches, los pillos hacen de las suyas y más sabiendo que las labores de patrullaje las hacen una vez a la cuaresma. Vivimos con el Cristo en la noche, cuando cae el sol, es que hasta dentro de las casas uno siente temo», declaró Juan Pérez.

Para finalizar, los ciudadanos que hacen vida en el Barrio La Paz, hacen un nuevo llamado a la municipalidad y a los entes competentes a tomar en cuenta sus requerimientos y por consiguiente consigan soluciones a estas dificultades que les entorpecen su calidad de vida.

DANIEL MELLADO | elsiglo – La Victoria