Con un despliegue de fervor, color y organización, el municipio José Félix Ribas, en Aragua, se prepara para vivir una de sus tradiciones más arraigadas, la conmemoración del Miércoles Santo, en honor al Nazareno.

Este año, la feligresía de la parroquia Nuestra Señora de Guadalupe renovará su fe en medio de misas, cantos y una procesión que recorrerá las calles con la imagen emblemática de Jesús con la Cruz a Cuesta, cargada en hombros por devotos.
Florentino Camargo, miembro de la directiva de la Sociedad del Nazareno, confirmó que los actos religiosos se realizarán con la misma intensidad espiritual que ha caracterizado a esta celebración por décadas.
«Es un día para honrar la promesa de fe, para recordar el sacrificio de Jesús y para fortalecer nuestra unión como comunidad. Cumplimos un año más demostrando que somos una comunidad que camina unida, en el marco del amor a nuestro señor Jesús de Nazaret», expresó.
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Tres misas y una procesión que conmueven
La jornada se iniciará a las 7:00 de la mañana con la primera de las tres misas programadas, las cuales se extenderán cada dos horas hasta las 5:00 de la tarde, cuando comenzará la procesión. Según Camargo, este horario busca permitir que tanto madrugadores como quienes trabajan durante el día puedan participar.
«Cada misa es una oportunidad para reflexionar y preparar el corazón. Queremos que nadie se quede fuera de esta experiencia espiritual, que nos renueva año por año», explicó.

A las 5:00 pm, la imagen del Nazareno, vestida con una túnica morada bordada en hilos dorados y cargadas de simbolismo, saldrá del templo matriz en hombros de 150 cargadores, número que podría aumentar con fieles que se sumen espontáneamente durante el recorrido.
La ruta, diseñada para abrazar simbólicamente el casco histórico de La Victoria, incluirá calles como la Candelaria, Francisco de Loreto y Dr. Carías, finalizando en la calle Candelaria Sur antes de regresar al templo. «Este camino no es sólo físico, es un viaje de purificación que nos recuerda el viacrucis de Cristo», destacó Camargo.
Un manto de flores y un testimonio de fe
Uno de los detalles más emblemáticos este año es la decoración de la imagen, la cual luce más de 800 flores entre naturales, eternas y orquídeas, estas últimas cultivadas por familias de la localidad como ofrenda.
«Cada flor representa una plegaria, una promesa cumplida o un agradecimiento», comentó Camargo, quien también se encarga del equipo de ornamentación. Además, la túnica del Nazareno fue confeccionada por una devota, que según la comunidad, recibió una sanación milagrosa hace cinco años tras encomendarse al santo.
La imagen, restaurada hace algunos años por artesanos locales, porta también una corona de espinas elaborada con metales dorados. «Es un símbolo de que, incluso en el sufrimiento, hay belleza y esperanza», reflexionó el directivo.
Cargadores, cantos y una comunidad que caminan juntos
La procesión, no sólo es un acto religioso, sino un evento que moviliza a toda la sociedad victoriana. Más de 2.000 personas se espera que acompañen el recorrido, entre ellos niños, ancianos y personas con discapacidad, para quienes se habilitarán espacios prioritarios.
Los cargadores, vestidos con uniformes de colores morado fuerte y pantalón oscuro, demostrarán como la fe se vive de diversas formas y esta es una de ellas. «Llevar al Nazareno es un honor, pero también una responsabilidad. Nos preparamos física y emocionalmente para esto».
Durante el trayecto se entonarán cantos tradicionales. En la avenida Francisco de Loreto, por ejemplo, se recordará la tercera caída de Jesús, momento en el que los fieles depositarán flores blancas en el suelo como símbolo de pureza.
Un esfuerzo colectivo
La organización del evento incluye la participación de Bomberos, Policías Municipales y voluntarios de la Red de Ambulancias, quienes garantizarán seguridad e hidratación. Además se instalaron puestos de primeros auxilios y se delimitaron carriles exclusivos para evitar congestiones.
«Es un trabajo de todos: iglesia, gobierno y pueblo. Aquí no hay diferencias; sólo un objetivo común», afirmó el alcalde Juan Carlos Sánchez, quien destacó que este año se reforzó el alumbrado público en el recorrido.
Los comercios locales también se sumaron, panaderías donarán agua y pan dulce, al igual que muchos de ellos donarán velas a los feligreses. «Es un día en el que La Victoria respira unidad», resumió Camargo.
Un legado que trasciende generaciones
Para muchos, esta tradición es un puente entre el pasado y el presente, donde se fusiona el sentir de toda una comunidad de manos de la fe y más tratándose de un día tan importante como el del Nazareno, santo por excelencia para los habitantes de esta parte del eje Este de Aragua.

La señora Celestina Flores, mientras llevaba algunas flores para adornar la imagen, mencionó: «Estoy muy contenta de nuevamente vivir esta tradición, de ir tras la imagen de mi Nazareno, tan milagroso y que tanto queremos aquí. Hoy participaré en mis posibilidades de todas las actividades, con oraciones, cánticos e iluminando la imagen».
Liseth Carrillo agregó: «Yo esta Semana Santa he pedido por mis familiares, por mí, por todo el mundo. Creo en Dios sobre todas las cosas y en su pasión que nos liberó de los pecados y eso debemos reconocerlo».
La señora Katiusca Castillo, en compañía de sus hijas, puntualizó: «Tengo más de 14 años pagando promesa, porque el Nazareno me hizo el milagro de quedar embarazada, luego de no poder. Le agradezco mi familia, mi vida, mi salud y sobre todo la salud de ellos que son mi motor».
Al finalizar la procesión, la imagen será recibida en el templo con una serenata instrumental, las flores utilizadas en la decoración serán repartidas entre los asistentes como bendición. «Llevarse una flor es llevarse un pedacito de la gracia del Nazareno», concluyó Camargo.
DANIEL MELLADO | elsiglo
MG