Teatro Ribas: Donde la cultura tiene voz propia

El 11 de julio del 2024 marcó el inicio de una nueva era para la ciudad de La Victoria, en el municipio José Félix Ribas del estado Aragua. Ese día, tras 15 semanas de un arduo proceso de recuperación, reabrieron las puertas del emblemático Teatro Ribas, devolviéndole a la ciudad no sólo una joya arquitectónica, sino también un epicentro de cultura, arte, historia y expresión ciudadana.

La cultura se fusiona para fortalecer la vida de este espacio


A un año de su reinauguración, este ícono cultural celebra su primer aniversario con una programación de alto nivel, la satisfacción de haber congregado a más de 23.000 espectadores en solo doce meses, y la convicción de que su existencia trasciende lo local, convirtiéndose en un faro para todo el estado Aragua y para Venezuela entera.

ECOS DE UN LEGADO TEATRAL QUE SIGUE VIVO


El Teatro Ribas, más que una estructura física, es un contenedor de vivencias, un baúl de memorias y un narrador silente que ha visto pasar generaciones de artistas, soñadores y espectadores.


Su historia se remonta a décadas atrás, cuando fue construido como parte de la infraestructura cultural de la ciudad; su nombre rinde homenaje al héroe epónimo del municipio, José Félix Ribas, y desde sus primeras funciones, como el teatro y hasta como Cine en algún momento de su historia, ha sido punto de encuentro para festivales, conciertos, presentaciones escolares, obras de teatro y actividades comunitarias.


La necesidad de su restauración surgió como un clamor colectivo. El abandono que durante años oscureció sus pasillos fue sustituido por esperanza, compromiso y trabajo en conjunto. De la mano del Gobierno nacional, regional y municipal, y bajo la dirección de un equipo técnico y artístico comprometido, el teatro resurgió como un verdadero templo para el arte.

CIFRAS QUE HABLAN


Desde su reapertura en julio de 2024, el Teatro Ribas ha albergado 186 eventos: 103 presentaciones durante el segundo semestre del año pasado y 83 más en lo que va de 2025. La variedad de actividades ha sido una constante: obras teatrales, conciertos sinfónicos, recitales poéticos, funciones infantiles, proyecciones cinematográficas, foros académicos, y más.

Rafael Figarella, presidente del Teatro Ribas de La Victoria


«Hemos recibido a unas 23.000 personas. Es una cifra que emociona, pero que además nos compromete a seguir brindando calidad, diversidad y accesibilidad», declaró Rafael Figarella, presidente del Teatro Ribas.


«El público de esta región es noble, respetuoso, agradecido y comprometido con la cultura. Nos ha dado verdaderas cátedras de comportamiento y de sentido de pertenencia», añadió.


Figarella también señaló que el teatro se ha convertido en un espacio, donde no existen barreras. «Aquí conviven todas las expresiones artísticas. Proyectamos lo propio, lo nacional y lo internacional. Buscamos mostrar lo mejor de Venezuela y del mundo, sin excluir a nadie», expresó.

UN ESPACIO DE ENCUENTRO


Para muchos, el Teatro Ribas se ha convertido en un lugar de refugio emocional, un sitio donde las historias ajenas se vuelven propias y donde la comunidad se mira a través del espejo del arte.


«El teatro es un lugar donde los sueños se materializan. Desde que reabrimos, no ha habido una semana sin actividad. Aquí confluyen los niños, las familias, los jóvenes, los adultos mayores, los cultores populares y los artistas profesionales. Este espacio ha sido y seguirá siendo un bastión para la identidad de La Victoria», afirmó Marcel Oramas, miembro del equipo técnico-artístico del teatro.


Oramas, destacó que el valor simbólico del recinto se hace palpable en cada función: «Cada pisada sobre su escenario trae una carga histórica. El público lo sabe, lo siente. Aquí no sólo se entretiene, aquí se educa, se transforma y se honra la memoria cultural de un país».

Marcel Oramas, miembro del equipo técnico-artístico del teatro

DE ARAGUA PARA EL MUNDO


En este primer año, el Teatro Ribas ha sido testigo de presentaciones de talla regional, nacional e internacional. Desde piezas teatrales de fuerte contenido social como «La Vagina en huelga», actualmente en gira por Europa; hasta majestuosas funciones como el Concierto de Solistas de Vivaldi, pasando por el I Concierto de Ópera del eje Este, la programación ha demostrado una versatilidad que atiende a todos los gustos y generaciones.


Este dinamismo artístico ha sido posible, gracias a la voluntad de un equipo que se esfuerza día a día por mantener los más altos estándares, pero también a la confianza del público.


«Estamos sembrando cultura y cosechando identidad. No hay mayor premio que ver la sala llena y sentir la energía de la gente conectada con lo que ocurre en escena», afirmó Figarella.

MÁS QUE UN TEATRO


De cara al segundo año, el Teatro Ribas prepara una ambiciosa agenda cultural, con alianzas estratégicas que permitirán traer producciones internacionales, al mismo tiempo que se fortalecerá el apoyo a las iniciativas artísticas locales y comunitarias.
«Nuestro objetivo es claro: ser plataforma de expresión, puente entre generaciones y vitrina para los talentos emergentes. El Teatro Ribas no es de una institución, es del pueblo, y seguirá escribiendo historia con cada obra, con cada aplauso, con cada emoción», subrayó Marcel Oramas.

Por lo menos 186 actos se han realizado en el teatro

DONDE LA CULTURA FLORECE


En tiempos donde la esperanza muchas veces parece escasa, el Teatro Ribas se levanta como símbolo de resiliencia y arte vivo. Su reapertura revitalizó un espacio y además reavivó el espíritu cultural de un municipio entero, y con él, el de todo un estado.
A un año de su renacimiento, queda claro que el Teatro Ribas es mucho más que un edificio, es un hogar para el arte, un refugio para las emociones, y un recordatorio constante de que la cultura no se derrumba: se transforma, se defiende y, sobre todo, se celebra.

DANIEL MELLADO

GM