Un número indeterminado de funcionarios de seguridad que prestaban servicio en el partido de fútbol entre las selecciones de Bolivia y Venezuela, celebrado en el estadio Monumental de Maturín, donde la Vinotinto se adjudicó la victoria, fueron trasladados de emergencia a diversos centros de salud de la capital monaguense debido a una presunta intoxicación alimentaria.

Los uniformados comenzaron a presentar síntomas de malestar poco después de consumir alimentos durante su jornada laboral en el evento deportivo. Ante ese suceso, se activaron los protocolos de seguridad.
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Equipos de emergencia actuaron rápidamente para brindar atención y trasladar a los afectados a hospitales y clínicas de la ciudad. El caso está bajo investigación de las autoridades policiales, especialmente del Cicpc.
Por otro lado, se tuvo información extraoficial que el número de intoxicados serían 150 funcionarios. Sin embargo, esa versión sería confirmada por las autoridades que investigan ese hecho ocurrido este viernes en horas de la noche.