Alerta por aumento de femicidios en Venezuela

Las alarmas se han encendido en todo el país ante el aumento de casos de femicidios. De acuerdo a las estadísticas oficiales de utopix.cc, en los primeros cinco meses del año 2025 se ha registrado un total de 61 femicidios en Venezuela. Esta cifra representa un preocupante incremento en comparación con años anteriores, siendo una alerta en los casos que exige atención inmediata.

Crece la preocupación por el aumento de femicidios en el país


Las estadísticas más recientes revelan un patrón alarmante, siendo las principales víctimas mujeres jóvenes, con edades comprendidas entre los 16 y los 25 años. Es por ello, que se debe de enfocar con urgencia la prevención y protección en este grupo de jóvenes.


Ante esta grave situación, nuestro equipo reporteril conversó con diversos especialistas, quienes han expresado su profunda preocupación y ofrecieron algunos análisis sobre las posibles causas y consecuencias de este aumento de violencia. Su perspectiva es esencial para entender la raíz del problema y proponer soluciones efectivas.


La directora del Departamento de Salud Mental del Instituto de la Mujer Aragua, Mónica Montenegro, con experiencia en el tratamiento de la violencia de género, explicó que una de las razones principales por las cuales ocurren los casos de femicidio, es porque al principio las mujeres no identifican las señales de los agresores. «Siempre están esos banderines rojos, lo importante es identificarlos a tiempo. El miedo por supuesto es uno de los potenciadores de que las mujeres callen, es importante identificar en qué momento de la relación o de mi dinámica de pareja, yo estoy siendo víctima de algún tipo de violencia».

Las cifras de femicidios generan preocupación social


Por otro lado, Montenegro mencionó que en la ley están tipificados 25 tipos de violencia, entre ellas, la violencia psicológica. «Cuando me estoy sintiendo minimizada, humillada, y llegan las faltas de respeto, son indicios que los normalizamos y los dejamos pasar. Decimos que va a cambiar, mejorar e inclusive casarnos o creer en la idea de que tener un hijo también pudiese mejorar la relación. Pero no es así, cuando caemos en la idealización cometemos el error más grande de todos, es importante identificar cuál es nuestro valor como mujer».


Hoy en día, esos «banderines rojos» se han normalizado tanto, que las mujeres no se dan cuenta que están siendo violentadas de una u otra forma. «Me doy cuenta que la familia está en extinción, hay relaciones que no duran más de tres años, porque hoy en día los jóvenes se adelantan tanto a lo fantasioso, que cuando conozco recientemente a una persona, ya automáticamente lo ven como que es perfecto, me quiero casar y no se dan el tiempo, ni ese espacio de convivir y conocer perfectamente a esa persona. Es importante que se permitan ese espacio y reconozcan evaluar su autoestima, para que no puedan caer o no caigan en una situación de violencia de género».


Asimismo, la directora de Atención y Prevención a la Mujer del Instituto de la Mujer Aragua y abogada, Mariangela Gil, expresó que el femicidio es una situación que no sólo ha venido aumentando en Venezuela. «Esto es algo que se está viviendo a nivel mundial. Una de las principales características cuando hablamos de femicidio es que le sucede a la mujer por su condición de ser mujer. Parte del femicidio es porque la mujer tiene el miedo a denunciar y a no ser escuchadas, por eso nosotros nos encargamos de sensibilizar a los entes rectores de denuncias».


Yalesky Mass, psicólogo de Inamujer, resaltó que familiares y amigos, de las víctimas de feminicidio también se ven afectadas. «Las secuelas más comunes que se pueden evidenciar son las secuelas cognitivas, estas involucran el autoestima y el auto concepto de estas mujeres. Aunado a los síntomas que observamos en el estrés postraumático, llamado ‘flash back’ de dichos acontecimientos».

Las mujeres se enfrentan a graves peligros ante el repunte de las cifras de femicidios


De igual manera, Mass señaló que la normalización de la violencia se puede encontrar de diferentes formas. «Por ejemplo, a través de la aceptación social de la violencia como algo cotidiano, esta aceptación social lamentablemente dificulta su denuncia, su tratamiento psicológico y finalmente su erradicación. La escalada se refleja en el aumento de la violencia donde existe una gran parte de la población que desconoce que la violencia de género va en aumento y el peligro de consumarse a un feminicidio es cada vez mayor», concluyó la psicóloga. Destacando que es importante que las personas conozcan que existen entes preparados para atenderlos psicológicamente de forma gratuita y así saber que no están solas.

HERRAMIENTAS DE PREVENCIÓN Y LUCHA CONTRA LA VIOLENCIA


Afortunadamente existen herramientas de gran valor para la prevención. Una de ellas es el violentómetro, un recurso visual y didáctico que ayuda a identificar los diferentes niveles de violencia en una relación de pareja. Este medidor, que va desde «bromas hirientes» hasta el «asesinato», es una herramienta de alerta que permite a las mujeres y a sus familias reconocer los patrones de violencia y actuar antes de que la situación escale a niveles mortales.

Mónica Montenegro, directora del Departamento de Salud Mental del Instituto de la Mujer Aragua


En Aragua existen instituciones que ofrecen atenciones a la mujer en diversas áreas. Entre ellas, el Instituto de la Mujer, allí el Departamento de Psicología ofrece atención, no solamente a mujeres, sino también a adolescentes. «A partir de los 16 y 17 años, empezamos a atender a las chicas».


«Aquí ofrecemos la psicoterapia, hacemos abordajes en la comunidad y también brindamos asesorías legales. Extendemos a la mujer nuestro apoyo y orientaciones a nivel legal, tienen que saber que cuentan con un equipo que está presto para apoyarlas», informó Gil.


En este sentido, y como parte de las acciones para contrarrestar esta grave situación, actualmente se está llevando a cabo el plan «habla para salvar». Esta iniciativa busca concienciar y brindar apoyo a las víctimas, promoviendo espacios seguros para la denuncia y el acompañamiento psicológico. «A través de estas campañas, nosotros captamos casos de violencia. No solamente de violencia, sino que también tenemos servicio y apoyo comunitario», dijo Montenegro.


Del mismo modo, Elia Benítez, presidenta del Instituto de la Mujer del municipio Santiago Mariño, señaló que el plan «habla para salvar» en la jurisdicción, busca erradicar la violencia de género y promover la denuncia de cualquier tipo de maltrato.


«El Instituto Para la Atención Integral de la Mujer, ha retomado esta iniciativa con visitas a comunidades y la creación de espacios para la atención y apoyo a la mujer».


El objetivo principal de «habla para salvar», es romper el silencio y orientar a las mujeres a fomentar sus denuncias cuando sean violentadas. «Todos los días viernes hacemos un abordaje con las promotoras, abogadas y psicólogas, un despliegue casa a casa.

Mariángela Gil, directora de Atención y Prevención a la Mujer del Instituto de la Mujer Aragua

Entregamos trípticos donde dejamos claro lo que es la erradicación de la violencia contra la mujer y también dejamos números de contactos a donde se pueden comunicar en caso de que se esté presentando alguna situación», puntualizó Benítez.

LLAMADO URGENTE A LA ACCIÓN


La comunidad en general hace un llamado urgente a las autoridades y a la sociedad para tomar medidas contundentes. Se insta a fortalecer las políticas de protección a las mujeres, asegurar el acceso a la justicia y promover campañas de concienciación que eduquen sobre las señales de la violencia y la importancia de denunciar.


«Hay que tener un poquito de valentía, sabemos que no es fácil, pero tienen que buscar ayuda, no están solas. Aquí tenemos un equipo multidisciplinario, me atrevo a decir que casi todos los institutos de las mujeres aquí en el estado Aragua pueden prestarles el apoyo y orientarlas en lo que corresponde inclusive en el área legal», concluyó la psicóloga Montenegro, enfatizando que la responsabilidad es de todos.


El aumento de los femicidios no es una estadística más, es un llamado de emergencia que no puede ser ignorado. Es un reflejo de una cultura que necesita sanar y transformarse.


Es necesario que las personas sean parte de esta lucha. Bien sea apoyando a una amiga en peligro o denunciando cualquier indicio de violencia, la acción individual, sumada a las políticas públicas, es lo que salvará vidas. El futuro de las mujeres venezolanas depende de la valentía de todos.

FABIOLA RODRÍGUEZ

GM