Desde hace al menos dos semanas, los residentes de la avenida 20 en el sector La Mora I del municipio Ribas, enfrentan una crítica situación debido al desbordamiento de un bote de aguas servidas que ha contaminado calles, alcantarillas y una canal de la zona.

Los afectados aseguran que el problema se intensificó tras las recientes lluvias, las cuales provocaron que las aguas putrefactas brotaran por las bocas de visita, generando un foco de insalubridad y obstruyendo el tránsito peatonal y vehicular.
«El mal olor es insoportable. El agua estancada cubre parte de la vía, y cuando llueve todo empeora, pues la suciedad inunda hasta los patios de las casas cercanas o las que se encuentran cerca del lugar», relató María González, vecina del sector.

Además, el agua contaminante se ha extendido hacia una canal que atraviesa La Mora I, llegando hasta zonas de la Tercera Entrada y el urbanismo La Mora II, donde también se reportan quejas por el hedor y la proliferación de insectos.
«Estas aguas pasan por parques, patios de viviendas y demás sitios, dejando su estela de hedor, necesitamos de verdad que alguien se haga cargo y nos ayude. No estamos pidiendo que nos regalen las cosas, nosotros como vecinos podemos cooperar, pero si necesitamos el apoyo, ya que no contamos con las maquinarias, ni los materiales», expresó Carolina Tirado.
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Más detalles sobre aguas servidas inundan calles de La Mora I en La Victoria
Los habitantes denuncian que a este problema se le suma otro bote similar en la avenida 7 de la misma comunidad, lo que agrava la emergencia sanitaria.
«Es una bomba de tiempo. Tememos que esto detone enfermedades en niños y ancianos, que por aquí hay bastantes. De verdad, es preocupante porque esas aguas expiden un olor bastante fétido», expresó José Pérez, otro residente.
Ante la falta de respuestas, los vecinos exigen a las autoridades locales y ambientales intervenir de inmediato para reparar la red de aguas residuales y limpiar el área. «Hemos hecho reclamos, pero nada cambia. Necesitamos soluciones ya, no promesas», insistió González.
Hasta ahora no se ha emitido un pronunciamiento oficial sobre las acciones a tomar. Mientras tanto, la comunidad permanece en alerta, esperando que el llamado a la atención prioritaria sea escuchado antes de que la situación escalé a un colapso mayor.
DANIEL MELLADO | elsiglo
MG