Las familias de la Calle 6, UD-9 de Caña de Azúcar, en el municipio Mario Briceño Iragorry, denunciaron el estado crítico de la vialidad.
Esta situación, que se arrastra desde hace más de un año, ha convertido la principal arteria vial del sector en una réplica de la luna, «lleno de cráteres», que ponen en riesgo a los conductores y sus vehículos.
A pesar de las constantes quejas y llamados a las autoridades, los vecinos, quienes se abstuvieron de revelar su identidad por temor a represalias, comentaron que la comunidad no ha recibido una respuesta efectiva por parte de los entes gubernamentales.
La problemática se desató inicialmente por antiguos botes de aguas servidas que fueron reparados, sin un plan de restauración de la vía, relataron los afectados.
La situación se repitió con la conexión de las tuberías de aguas blancas a un nuevo pozo. Una vez que se completó la obra, las calles quedaron rotas, sumando nuevos daños a los ya existentes.
Por otra parte, el acceso vehicular se ha vuelto una odisea, con baches cada vez más grandes que obligan a los conductores a realizar maniobras para evitar daños en sus vehículos.
«Por todos lados hay huecos; en Arsenal también está así», afirmó un vecino que prefirió mantener el anonimato.
Los vecinos de la zona expresaron su frustración por la falta de atención por parte de los entes gubernamentales, ya que a pesar de que la problemática ha sido planteada en múltiples ocasiones, la comunidad se siente desatendida.
Asimismo, manifestaron que guardan la esperanza de recibir apoyo, ya que en otros sectores ha llegado el asfaltado. Por lo tanto, piden a las autoridades municipales y regionales que no se olviden de ellos.
CHIQUINQUIRÁ RIVERO | elsiglo
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