Con el objetivo de fortalecer el desarrollo y la sostenibilidad de las empresas familiares en el estado, Fedecámaras Aragua llevó a cabo un conversatorio sobre aspectos legales y de gestión de las mismas, desde las instalaciones del Instituto Los Próceres.

La actividad, que reunió a representantes de diversos sectores productivos, resaltó la importancia de la capacitación para este tipo de organizaciones, que constituyen la columna vertebral de la economía regional.
Héctor Gómez, presidente de Fedecámaras Aragua, enfatizó la relevancia de abordar la realidad de las empresas familiares. «Debe existir una capacitación y conocimientos legales sobre las empresas familiares, ya que estas representan el 70% del tejido empresarial regional, y eso conlleva a generación de empleos, a productividad», afirmó.

Asimismo, destacó el compromiso de Fedecámaras con la formación de sus miembros. «Nos hemos preocupado por capacitarlos y esta charla ha sido muy motivadora», expresó.
Este conversatorio propició un espacio de encuentro entre diversos actores, entre ellos, el sector gremial, empresarial, sector comercio, industria, que influyen en la vida y el acontecer regional.
La actividad, que se realizó por invitación, contó con la participación de unas 40 personas provenientes de distintos sectores. «Nos vamos muy contentos, con mucha satisfacción de haber logrado el éxito y que el mensaje llegue, porque para tener una empresa hay que estar capacitado y entender todos los aspectos legales para que la empresa tenga el mayor de los éxitos», concluyó Gómez.
El ponente principal de este encuentro fue el abogado Gilberto Reyes Kinzler, quien elogió la iniciativa de Fedecámaras Aragua. «Una interesante iniciativa de organizar un desayuno conversatorio para tratar el tema de las empresas familiares al que le pusimos por nombre ‘tres círculos y siete roles», explicó.
Durante su exposición, el experto se refirió a la dinámica particular de estas empresas, donde los roles familiares y empresariales a menudo se entrelazan. «Nos referimos a los roles que se van desarrollando en la familia para que el proyecto salga adelante, pero también se generan conflictos emocionales en el seno familiar que pueden ser trasladados a la empresa y esto puede incidir en los logros, los objetivos», advirtió Reyes Kinzler.

La solución, según el abogado, radica en la planificación y la profesionalización. «La idea es llevar a la conciencia a toda la familia empresaria que una planificación ordenada, un protocolo de ingreso, de trabajo, de participación en la empresa familiar, tiende a ordenar los roles de cada uno de estos miembros dentro de la empresa», enfatizó.
También se refirió al factor cultural venezolano, que a su juicio, influye positivamente en la constitución de empresas familiares. «El hecho que desde el seno del hogar nazca la idea de emprender un negocio es algo que veo más positivo que negativo; lo negativo son las emociones y cuando lo subjetivo influye en lo objetivo», dijo.
CHIQUINQUIRÁ RIVERO | elsiglo
fotos | SANTIAGO GONZÁLEZ (pasante)
CJL