Los periodistas argentinos sufren el acoso y los insultos públicos del presidente Javier Milei en entrevistas televisivas y en las redes sociales, al que se le suman otros miembros del gobierno y hordas de seguidores en un contexto cada día más complicado para la prensa.
Este es el panorama que describe sobre Argentina la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) en su Índice Chapultepec 2024 sobre la Libertad de Prensa en las Américas, un informe pendiente de aprobación por su 80 Asamblea Anual, que se celebra precisamente en la ciudad argentina de Córdoba.
La Asamblea fue inaugurada este jueves por el presidente de Paraguay, Santiago Peña Palacios, pero ni Milei ni un sólo integrante de su gobierno se han acercado al hotel Quinto Centenario de Córdoba, donde se celebra la convención de la prensa americana.
Un tercio de los ataques a los periodistas vinieron este año del propio presidente Milei, según datos del Foro de Periodismo Argentino (Fopea), que recoge la SIP en su informe.
De ‘ensobrados’ a ‘extorsionadores’, los insultos de Milei a los periodistas
“Más de medio centenar de periodistas resultaron desacreditados en entrevistas televisivas o en mensajes en redes sociales con epítetos como ‘ensobrados’ (en alusión a un supuesto condicionamiento de su trabajo por publicidad estatal), ‘mentirosos’, ‘difamadores’, ‘esbirros’, ‘manipuladores’, ‘extorsionadores’ y ‘cómplices de los violentos’, argumenta la SIP en su informe, que se verá aprobado en asamblea este domingo.
Uno de los episodios más graves ocurrió el 28 de septiembre, cuando el presidente argentino gritó insultos contra los periodistas en un acto y, a continuación, miles de militantes de su espacio político, La Libertad Avanza (LLA), repitieron una y otra vez: «hijos de puta».
Estos hechos conllevan un “efecto contagio que se manifiesta en hordas digitales que amplifican los insultos”, advierte la SIP, al destacar que incluyen “amenazas de muerte”, por lo general anónimas.
La SIP explica que el conocido periodista Jorge Lanata, con graves problemas de salud y en ingreso hospitalario, anunció que iba a presentar una demanda tras haberle llamado “ensobrado” por el presidente, quien con ese calificativo lo acusó de delito de soborno.
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Recortes en publicidad estatal y decreto contra la transparencia
Editorial Perfil y su editor, Jorge Fontevecchia, han iniciado trámites judiciales por hechos similares y han denunciado ser víctimas de discriminación publicitaria. Piden, por ello, una indemnización por daños y perjuicios.
“La primera demanda fue rechazada por el juez Sebastián Ramos, con un sobreseimiento ‘express’ al presidente. Fontevecchia apeló la resolución, proponiendo como ‘amicus curiae’ a Amnistía Internacional, Reporteros sin Fronteras, Fopea y Adepa”, agrega el informe.
Milei ha llevado a cabo una polémica suspensión de la publicidad estatal a los medios, justificada en un ajuste del gasto público, pero “organismos descentralizados y empresas públicas han usado fondos para publicidad con criterios comerciales, en algunos casos con presupuestos superiores a los que tenían en años anteriores”, revela la SIP.
Cuando un grupo de diputados pidió información sobre esos fondos, el Gobierno de Milei respondió con un decreto que introdujo restricciones a la Ley de Acceso a la Información Pública.
La SIP recuerda que la Ley de Acceso de 2017, en línea con la jurisprudencia de la Corte Interamericana y acorde a los estándares internacionales, fue uno de los hitos en la ampliación y consolidación de la libertad de expresión en Argentina.
Milei no atiende a la prensa
La SIP denuncia que “el presidente Milei no ha ofrecido ruedas de prensa desde que asumió el cargo el 10 de diciembre de 2023, se comunica y opina a través de la red X y restringe sus entrevistas a un grupo muy reducido de periodistas”.
Es el portavoz presidencial, Manuel Adorni, quien informa a diario a los periodistas acreditados en la Casa Rosada y su actuación no ha estado exenta de polémica, pues pone contra las cuerdas a quienes le hacen preguntas incómodas y ha intentado retirar la acreditación a informadores, como la periodista Silvia Mercado.
EFE
JAS