Hacer ejercicio con regularidad es parte importante de un estilo de vida saludable. Según estudios, aquellas personas que mantienen una rutina deportiva diaria y dinámica tienen menor probabilidad de enfermarse y mayor posibilidad de disfrutar de una vida más larga y sana.
Y es que con estas prácticas no sólo se mejora la condición física, sino que también tiene un impacto en la salud mental y en la sensación general de bienestar. Expertos recomiendan a niños, jóvenes y adultos adoptar hábitos que incluyan actividad física en su vida diaria, como por ejemplo caminar o trotar.
La actividad física es esencial para mantener un peso corporal saludable, incluso, es beneficiosa durante el embarazo. Sin embargo, los especialistas recomiendan tomar medidas para mantenerse libre de lesiones, recordando que la nutrición y la hidratación también juegan un papel importante.
Además, mantenerse físicamente activo puede ayudar a prevenir enfermedades graves, reduciendo el riesgo de cardiopatías y accidentes cerebrovasculares. Por ello, si no haces ejercicio, realizar un poco más de actividad física puede ayudarte a reducir el riesgo de que padezcas estas afectaciones.
El ejercicio se ha relacionado con la reducción de síntomas de ansiedad y depresión, promoviendo la liberación de endorfinas que generan una sensación de felicidad. También, la evidencia sugiere que aquellos que se ejercitan regularmente pueden vivir más tiempo, disfrutando de una calidad de vida significativamente mejor.
En la actualidad, el sedentarismo se ha vuelto común, el ejercicio regular no sólo es vital para el bienestar individual, sino también contribuye a la salud pública en general.
HERNÁN GONZÁLEZ | elsiglo
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