Un sujeto identificado como Anderwuin Noriega Prado, de 18 años, de nacionalidad venezolana, fue capturado por la Policía colombiana, señalado presuntamente de intentar cometer un atraco en una joyería en Bucaramanga.
Tras su presentación ante un tribunal, el joven, bajo medida de aseguramiento, fue enviado a los calabozos por su presunta participación en el intento de atraco en una joyería del Centro de Bucaramanga.
Se informó que fue presentado en audiencias ante un juez de garantías en la tarde de este domingo, 4 de agosto. La Fiscalía le imputó cargos por los delitos de homicidio en grado de tentativa, fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, daño en bien ajeno y hurto.
En la diligencia judicial se presentaron testimonios de testigos, registros de cámaras de seguridad, entre otras evidencias que vinculan a Noriega Prado con estos hechos en los que dos personas, un vigilante y un menor de edad, resultaron heridas. A pesar de las evidencias, no aceptó su responsabilidad.
Sin embargo, un juez de control de garantías determinó enviar a prisión al procesado ante lo expuesto por el ente acusador.
Noriega Prado, junto con otra persona, ingresó sobre las 9:32 a.m. de este sábado, 3 de agosto, a la Joyería Wilson, ubicada en la calle 34 con carrera 18 del Centro de Bucaramanga. Otros dos hombres en motos se quedaron afuera esperándolos.
En la puerta se encontraba parado el guarda de seguridad, quien fue encañonado por estos sujetos que procedieron a robarle su arma de dotación.
El hoy capturado, de acuerdo con el registro de las cámaras de seguridad, saltó una vitrina para intentar hurtar cuanto objeto de valor encontrara a su paso. Al interior del local, se generó un forcejeo con los empleados y el dueño.
«Él intentó hurtar establecimiento comercial, a su vez accionó el arma de fuego en repetidas ocasiones para buscar herir a los ciudadanos que se encontraban en el establecimiento comercial», se lee en el reporte de la Policía.
Un menor de edad, familiar del propietario, resultó lesionado tras estos disparos. El cómplice de Anderwuin Reinaldo, al ver la situación compleja, decidió irse con los otros dos sujetos en las motos, no sin antes propinarle un tiro en un hombro al vigilante. El acusado fue detenido por la comunidad, evitando su fuga, y propinándole una paliza en la vía pública.
«Durante la realización de los hechos, el ciudadano dejó abandonada el arma de fuego y la ciudadanía, metros adelante del establecimiento comercial, lo detuvo», precisaron las autoridades.
Los otros asaltantes se llevaron el arma de dotación del guarda de seguridad, un revólver calibre 38 con 6 cartuchos en su interior.
Tanto el vigilante como el menor de edad heridos fueron trasladados al Hospital Universitario de Santander, HUS, en donde, según las autoridades, permanecen estables y en recuperación.
STC
