Las fuertes precipitaciones de la noche del lunes, ocasionadas por el paso del la onda tropical número 27, dejaron como resultado anegaciones en diversas comunidades del los municipios Girardot, Mario Briceño Iragorry y Francisco Linares Alcántara.
En el caso específico de las comunidades cercanas al Lago Los Tacarigua, sus habitantes permanecieron alertas ante un aumento considerable en el nivel del agua, sin embargo, al estar encendidas las estaciones de rebombeo, la situación «no pasó a mayores».
En el sector Paraparal del municipio Francisco Linares Alcántara, durante algunas horas, las aguas del lago alcanzaron dos cuadras más de lo habitual, pero al cesar la lluvia, estos niveles fueron bajando con el paso de las horas.
Familias afectadas comentario, que aunque la situación en esta oportunidad no se salió de control, las condiciones en las que están viviendo no les permiten permanecer en calma.
«No sabemos si un día el clima no juegue a nuestro favor y volvamos a perder nuestros enseres, si de por sí, cada vez que llueve nos inundamos, imagínese si las precipitaciones son intensas y constantes, qué va a pasar con nosotros», se preguntó uno de los habitantes del sector, quien no quiso revelar su identidad.
Otros de los afectados en este asunto es Héctor Rodríguez, quien lleva toda su vida viviendo en este sector y asegura que se trata de una problemática que, «se escapa de las manos de la Alcaldía y de la Gobernación», ya que a su juicio, aquí se deben realizar proyectos que diseccionados desde el Ejecutivo nacional.
«La solución no es poner unas bombas para tirar el agua del barrio para el otro lado, porque va a llegar el momento en el que ese muro de contención va a colapsar y se va a acabar medio Maracay. Esto tiene demasiada agua, ya parece el mar, la solución es sacarle el agua a la laguna», precisó Rodríguez.
En cuanto a las últimas precipitaciones, Rodríguez aseguró que aunque hubo anegaciones, ya esta una situación que para ellos ya es normal. «No ha pasado más nada gracias a Dios, pero si sigue lloviendo, sigue subiendo el agua», añadió.
Por otra parte, detalló que en estos momentos cuentas con bombas de gasoil pero también con bombas eléctricas para cuando no haya el combustible y por lo tanto, los niveles del lago se han mantenido controladas.
CHIQUINQUIRÁ RIVERO | elsiglo
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