El 24 de julio es una fecha muy importante para la historia de Venezuela, primero porque ese día es el Natalicio de Simón Bolívar, El Libertador, y segundo, por la Batalla Naval del Lago de Maracaibo, considerado uno de los enfrentamientos más sangrientos de la guerra de independencia.
Sobre este último punto, tienen un interés particular, ya que el desenlace de este episodio fue uno de los últimos entre la Corona Española y el Ejército Patriota, que luego de la Batalla de Carabobo, vieron este enfrentamiento lacustre como el estertor de la guerra.
En 1823, en las aguas marabinas, las fuerzas patriotas bajo el mando del almirante José Prudencio Padilla, se enfrentaron a la poderosa escuadra española, comandada por Ángel Laborde.
El escenario era desafiante para ellos, ya que sus estrechos canales y bancos de arena representaban un reto complejo para la navegación. Sin embargo, Padilla, conocedor del lago como la palma de su mano, aprovechó estas características a su favor.
La astucia del almirante fue clave, ya que se basó en dividir su flota en dos grupos: uno con las embarcaciones más ligeras y otro con las más pesadas.
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TRIUNFO CONTUNDENTE
De acuerdo a historiadores, el primer grupo, al mando del capitán Manuel Bernardo Germán, atacaría de frente a la flota española, mientras que el segundo, comandado por el propio Padilla, flanquearía al enemigo.
La batalla comenzó con un intenso intercambio de cañonazos. Las embarcaciones patriotas, más pequeñas y maniobrables, esquivaban con agilidad los disparos españoles, mientras respondían con certera artillería.
Pero el punto álgido de la batalla fue la quema del buque insignia español, el «Almirante Brión». Este hecho sembró el caos y la confusión entre las filas realistas, quienes comenzaron a perder espacio.
Victoria contundente y un futuro liberado tras horas de combate, la flota patriota logró un triunfo contundente. La mayoría de los barcos españoles fueron capturados o hundidos, y los pocos que lograron escapar huyeron en desorden.
La Batalla Naval del Lago de Maracaibo fue un triunfo decisivo para las fuerzas independentistas. Con la toma del control del lago, se cortó el último bastión español en Venezuela, lo que aseguró la independencia definitiva del país y consolidó el ideal de la Gran Colombia.
Por eso, la historia reconoce el heroísmo de Padilla y sus hombres sigue recordado y celebrado cada año en Venezuela, como un símbolo de la lucha por la libertad y la independencia.
DETALLES DE UNA BATALLA
- Patriotas: 17 embarcaciones, 256 cañones y 1.500 hombres.
- Españoles: 15 embarcaciones, 332 cañones y 2.500 hombres.
BAJAS
- Patriotas: 150 muertos y 200 heridos.
- Españoles: 1.500 muertos y heridos, 700 prisioneros.
CONSECUENCIAS
- Independencia definitiva de Venezuela.
- Consolidación de la Gran Colombia.
- Inspiración para otros movimientos independentistas en América Latina.
LINO HIDALGO | elsiglo
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