El pasado lunes 29 de mayo en la ciudad de Concepción, a unos 400 kilómetros de Chile, la policía nacional de ese país detuvo a una joven venezolana, vinculada directamente en la organización criminal “El Tren de Aragua” y a nueve sujetos más, incursos en diversos delitos y a la explotación sexual.
Las autoridades identificaron a la muchacha como Mary Emilia Colmenares, quien a mediados del 2021 se instaló en Chile, junto a otros delincuentes, para dedicarse exclusivamente a la explotación sexual, especialmente de adolescentes y liderar en esa nación, una de las organizaciones más peligrosas de Venezuela y buena parte de Suramérica: “El Tren de Aragua”.
Durante la ejecución de la operación policial, la voluptuosa criolla, oriunda de Puerto Cabello del estado Carabobo, resultó detenida después de un arduo trabajo de seguimiento sobre delitos de trata de personas, explotación sexual, tráfico de drogas y homicidios en esa zona austral, entre otros hechos delictivos, según la información que se maneja a través de las redes sociales y medios de comunicación social de Chile.
Se informó extraoficialmente que Mary es compañera sentimental de un presunto mafioso colombiano identificado como Franco Ceballos, cabecilla de esta pandilla originaria de Venezuela.
LA TIKTOKERA
De acuerdo a las informaciones que se manejan en base a la presunción, la chica se dedicaba además, en sus ratos libres y de esparcimiento, a exhibir sus atributos y lujos en la red social de TikTok.
Se exhibía en la red de ser una mujer adinerada y vivir un confort, conocida asimismo como la “muñeca de lujo”.
Aprovechaba la red social para ofrecerse como una “dama de compañía” junto a otras compatriotas suyas para brindar los servicios sexuales en el país austral. También se veía muy activa en redes sociales como Instagram, donde tenía muchos seguidores. Realizaba a diarios publicaciones.
EXPLOTACIÓN SEXUAL
Sin embargo, cuando los hombres buscaban “esparcimiento” con las chicas, salían desencantados porque la voluptuosa criolla no estaba. Se valía de sus trampas para engañar a los caballeros y reclutar a las venezolanas, quienes eran objeto de explotación sexual.
Los diarios chilenos informaron que el grupo criminal cobraba a las muchachas una especie de impuesto cercano a 4.500$, por supuestos gastos operativos, como traslados, servicios de producción y publicación de fotografías en una página web donde se ofrecían servicios sexuales, así como estadía y alimentación, según recogió el portal de Infobae.
Quienes incumplían con los pagos sobre ese concepto, la organización criminal pasaba factura. Muchas de ellas resultaron asesinadas, según lo refleja la prensa.
Vale destacar que las muchachas que llegaron a Chile procedentes de Venezuela las trasladaron, en su mayoría, bajo engaños y a la fuerza, dijo la policía. En resumen, Mary Emilia exhibe en TikTok un video donde se muestra junto a un buzo, portando un arma de fuego, propiedad de su pareja.
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De obtener fama y prestigio en la red social y en otras plataformas, ahora la porteña pasará un buen rato de su vida tras las rejas de la cárcel de Chile como una peligrosa delincuente. Se le acabó la vida en las redes sociales.
YN
