Vecinos de las comunidades de Guayabal y Coromoto en la parroquia San Francisco de Asís del municipio Ezequiel Zamora, elevaron sus denuncias públicas ante el presunto hostigamiento policial.
Este viernes los habitantes de ambos sectores escenificaron una protesta pacífica para hacer un llamado al fiscal General de la República, Tarek William Saab e igualmente al Fiscal Superior de Aragua. Pidieron la presencia de los periodistas para manifestar su preocupación y dejar sentada la denuncia públicamente.
Júnior González y la señora Evi Medina, quienes residen con sus hijos en esos sectores, pidieron la presencia de ambos funcionarios para que constaten la realidad que viven 540 familias.
Dijeron que ellos no están en contra de los operativos que realizan los funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas e igualmente de la Guardia Nacional Bolivariana o cualquier otro órgano policial del municipio.
“Ellos como institución cumplen una labor de brindar seguridad al ciudadano, pero no aceptamos que ingresen a nuestros ranchos sin ninguna orden judicial, nos humillen y nos califiquen de delincuentes”, agregaron los denunciantes.
“Entendemos que somos personas muy pobres y con muchas necesidades, menos delincuentes o azotes de barrio. El hecho de que vivamos en tales condiciones, no nos conceden el título de antisociales o integrantes de bandas delincuenciales”, dijeron.
También denunciaron la destrucción de varias viviendas y tres de ellas fueron quemadas ¡Ya basta del hostigamiento policial!, exclamaron.
Expresaron los ciudadanos que las comisiones del Cicpc y de la GNB ingresaron al barrio buscando a unos delincuentes y se internaron a varias casas, golpeando a los residentes, especialmente a una joven.
Solicitan investigación
Mientras que Yoiser Mijares se quejó que los guardias rurales se lo llevaron preso de su sitio de trabajo, y gracias a la pronta intervención de la Fiscalía 20° del Ministerio Público y los vecinos, logró salir bien.
“Me trasladaron a La Sipa, donde me querían liquidar y de paso me obligaron a tomar una foto con un armamento, haciendo aparentar que yo era un delincuente. Querían que mi padre les cancelara 1.600 dólares en efectivo para eliminar la foto. Querían extorsionar a mi familia”, afirmó.
“No somos personas adineradas y vivimos del día a día. Solicito una investigación y apliquen las sanciones contra esos militares. Eso se llama corrupción y como el Gobierno está actuando con “mano de plomo” a través de la operación “Caiga quien Caiga”, es importante que la investigación se oriente hacia las comunidades de Guayabal y Coromoto. Ahí están los testimonios reales”, expresó el denunciante.
Advirtió al Fiscal General de la República que si le llagase pasar algo a su persona o cualquier otro miembro de la comunidad, los culpables están en la sede de los Comandos Rurales en los Valles de Tucutunemo.
Odalis Yovera denunció que los hechos ocurrieron el 20 de marzo en horas de la tarde en el sector Coromoto, donde quemaron varios ranchos y de paso se llevaron las bombonas, alimentos y cosas personales.
“Yovera pidió la ayuda de la gobernadora del estado Aragua, doctora Karina Carpio, para acabar con esta pesadilla. Señora gobernadora ya estamos cansados del atropello policial en las comunidades de Guayabal y Coromoto. Ponga coto al asunto”, finalizó diciendo la joven.
LUIS ANTONIO QUINTERO | elsiglo
foto | JOEL ZAPATA
