Muchos artistas temen que la evolución de la tecnología deje a un lado el trabajo manual, pero Rurik Chastre decidió no ver a las máquinas como enemigas y emprender en un área en el que ambos (humanos y máquinas) deben coexistir para crear grandes obras maestras.
El Paper Craft es la base del conocimiento sobre el arte 3D que involucra tecnología y trabajo manual
Con este deseo de seguir innovando y sumergido en el mundo del diseño y las artes plásticas, Chastre inició su proyecto 3D Factory (@3dfactorypublicidad), un emprendimiento relacionado al 3D digital y físico donde las figuras se trabajan con polígonos para realizar un arte llamado “Paper Craft”, que es la base de todo un universo de posibilidades en las que se puede fusionar la tecnología con el trabajo manual, ya que consiste en armar figuras a partir de polígonos, partiendo desde un diseño digital.
“Todo empezó porque yo trabajaba con unos amigos haciendo figuras de anime talladas a mano y en esa búsqueda de seguir creciendo conseguimos otras técnicas que nos llevaron a esto, porque somos artistas plásticos que hemos pasado por distintas áreas como la pintura, la aerografía y esculturas, ahora queremos pasar a un nivel más comercial”, relató el emprendedor.
El Paper Craft o el 3D
Chastre asegura que el Paper Craft o el 3D poligonal están entrando al país, igual que la impresión 3D, pero que a nivel artístico no se le ha sacado el provecho necesario, ya que, a su juicio, las máquinas “nos otorgan la posibilidad de seguir haciendo arte fuera de lo convencional”.
Ante el constante debate que existe en torno a este tema, este artista afirma que la tecnología nunca podrá sustituir al humano en su totalidad, porque la creatividad no nace de una máquina sino del ser humano. “Nosotros somos los que le ordenamos y les damos parámetros para que ellas puedan desarrollar algo”, precisó.
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En la actualidad, Chastre forma parte de un proyecto para fundar un instituto que forme a los jóvenes artistas y diseñadores, combinando varias tendencias como el diseño gráfico, la aerografía, escultura y diseños en 3D.
“Queremos desarrollar un pensum de estudio con toda la base necesaria para que muchas personas aprendan bien este oficio, porque las mismas máquinas exigen que tengas conocimientos sobre arte y diseño, y los estudios convencionales se están quedando cortos”, añadió el emprendedor.
CHIQUINQUIRÁ RIVERO | elsiglo
