Muchas cosas se han dicho sobre los profesionales de la educación en las últimas semanas, ya que al igual que los distintos gremios que trabajan en la administración pública se encuentran realizando actividades de calle para exigir mejoras salariales, sin embargo, en la UPEL El Mácaro, a pesar de apoyar con firmeza toda la lucha de los trabajadores del país, continúan con la programación establecida en su lugar de trabajo.

Es importante señalar que en los últimos años la Universidad Pedagógica Experimental Libertador ha perdido un gran número de trabajadores y estudiantes, producto de la situación a la que deben enfrentarse los maestros en Venezuela, por lo cual, no ven factible esta profesión.
UPEL El Mácaro
Sin embargo, para este año académico, según la información otorgada por Dilcia De Rosas, subdirectora de Investigación y Postgrado del instituto rural El Mácaro de la UPEL, están en un proceso de concurso porque “paradójicamente, hay muchos profesores que quieren integrarse al trabajo, porque de alguna manera, nosotros somos formadores de formadores, somos docentes de vocación”.
Por otro lado, no negó que han perdido mucho personal, tanto docente como administrativo y obrero; lo mismo ocurrió con los estudiantes, pero actualmente han visto mucha disposición para continuar en la universidad.
“El Mácaro tiene una matrícula sobre mil estudiantes y obviamente no es la cantidad que se inscribían en un pasado, porque ser docente para ganar el sueldo que se está ganando, desmotiva, pero el hecho de que todavía existan personas apostando por esta carrera, nos motiva, porque aunque bajó la matrícula, no desapareció y nosotros estamos aquí para darle respuesta a todos esos muchachos que todavía ven en la docencia una de las mejores profesiones”, continuó De Rosas.
En este sitio, también explicó que representan uno de los institutos desconcentrados y por lo tanto, tienen estudiantes en seis estados de Venezuela y hasta ahora continúan en proceso de inscripciones, combinando la virtualidad con la presencialidad, debido a las carencias de su infraestructura y servicios básicos con los que no cuentan.
En otro orden de ideas, De Rosas informó que recientemente el Consejo Universitario de la UPEL acaba de aprobar una resolución donde apoya todos los procesos de protesta que se están realizando para defender los derechos de todos los maestros.
Necesitan mejoras en la infraestructura y servicios
La Dra. Gineth Serrano, subdirectora de Extensión de la UPEL El Mácaro, añadió que a pesar de todas las circunstancias han asumido el compromiso de sacar esta universidad adelante, “haciendo como el salmón, nadando contra la corriente”, ya que con tantas carencias en el sector educativo, la matrícula ha venido mermando desde el 2018 y esta problemática se acrecentó durante la época de la pandemia.

“Cuando regresamos a las aulas luego de la pandemia, nos encontramos con una realidad muy triste, porque fuimos totalmente desmantelados y nos tocó mantenernos en la universidad sin presupuesto para restaurar las instalaciones, todavía no tenemos electricidad, sino que hicimos una instalación improvisada para poder tener bombillos, porque ya hemos enviado muchísimas cartas a distintas instituciones solicitando ayuda, ya que sin la electricidad nuestro personal no puede estar mucho tiempo aquí”, relató Serrano.
Hasta los momentos, según explicó la subdirectora, sólo cuentan con el apoyo de la Alcaldía de Mariño para surtirlos de agua, porque no les llega por tuberías, además de algunos trabajos de limpieza, “lo demás ha sido por cuenta nuestra, porque este no es un consejo directivo de papel, si hay que barrer, barremos, si hay que pintar, pintamos, porque este es un trabajo de todos”.
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En cuanto a las protestas, Serrano aseguró que aunque apoyan las acciones de protesta, continúan dando clases, “ya que los espacios educativos no se pueden dejar solos y menos ahora que muchos estudiantes y profesores que se habían ido del país están pidiendo reingreso y siguen existiendo personas dispuestas a ejercer la docencia”.
CHIQUINQUIRÁ RIVERO | elsiglo