Los candidatos presidenciales de Brasil presentaron sus propuestas de gobierno ante el Tribunal Superior Electoral (TSE) de cara a las elecciones del próximo 2 de octubre.
Propuestas obligatorias
Las propuestas obligatorias para los 11 candidatos precisan las estrategias de cada aspirante a gobernar en los próximos cuatro años, en las áreas económica, empleo, salud, educación, transporte y seguridad ciudadana.
El líder social y ex presidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva, por el Partido de los Trabajadores, y apoyado por siete organizaciones centradas en la coalición Brasil de la Esperanza, manifestó como principal compromiso la reconstrucción social y económica del país.
Asimismo, expresó compromiso en ser garante de la democracia, soberanía y paz; combatir la pobreza a través de la educación y un nuevo Sistema Nacional de Cultura, así como más acceso a la vivienda.
Lula propone crear o reactivar ministerios como: los Pueblos Indígenas, de la Mujer, la Previsión Social, y ampliará las relaciones de Brasil con la Unión Europea (UE) en diversas áreas, principalmente en la preservación de la Amazonia, sin renunciar a la soberanía nacional.
Por su parte, el actual presidente, Jair Bolsonaro, del Partido Liberal, presentó un plan titulado Por el bien de Brasil, que abarca seis ejes estratégicos: economía, tecnología e innovación; salud, educación y social; seguridad y defensa; infraestructura logística; sostenibilidad ambiental; y gobernanza y geopolítica.
Candidatos presidenciales de Brasil
Ciro Gomes, del Partido Democrático Trabalhista, enfocó su propuesta de gobierno en la parte económica con un plan de inversión en ciencia, reducción de la informalidad, mejora de los servicios de salud, reducción de la pobreza y ampliación de servicios básicos.
La candidata y profesora Simonet Tebet, del Movimiento Democrático Brasileño, dividió su propuesta en cuatro ejes principales como la justicia social, ciudadanía y lucha contra las desigualdades; economía verde y desarrollo sostenible; gobierno socio de la iniciativa privada; y gobierno inclusivo, seguro y transparente, entre otras proyecciones.
Para José María Eymael de Democracia Cristiana, el empresario expresó compromiso con la política económica orientada al desarrollo, promover una reforma tributaria, desarrollar una Política Nacional de Seguridad Pública, crear el programa Salud Inteligente, priorizar la educación, crear políticas para los ancianos y combatir la corrupción.
El también candidato presidencial, Leonardo Péricles, por Unidad Popular, expuso un plan de gobierno basado en el surgimiento de la economía y acciones de emergencia y estructurantes como suspender el pago de intereses de la deuda pública, lo cual garantizará la ayuda de emergencia de un salario mínimo, y reducir los altos salarios en los poderes Legislativo, Ejecutivo y Judicial.
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La concentración de riquezas
La propuesta de la candidata Vera Lúcia, del Partido Socialista de los Trabajadores Unificados, consiste en el enfrentamiento de la desigualdad y la concentración de riquezas en el país.
En cuanto a la abogada Soraya Thronicke, del partido Unión Brasil, tiene un plan que defiende el Impuesto Único Federal, la promoción de la seguridad jurídica de las inversiones de bajo carbono, el combate a las actividades ilegales de comercio de madera y mineral de la Amazonia y el refuerzo de la enseñanza técnica.
Sofía Manzano, del Partido Comunista Brasileño, abarca un programa de emergencia, que reúne reivindicaciones de la clase trabajadora; y el programa de la revolución brasileña, con propuestas de reorganización de la economía.
Plan de emergencia
En su plan de emergencia hay 21 puntos, desde la creación de ley de responsabilidad social, con la restricción de privilegios y salarios altos mandatarios de los poderes civiles y militares, combate al desempleo, reforma tributaria, vivienda, educación y cultura.
La propuesta de Kelmon Souza, del Partido Trabalhista Brasileño, señala la reducción del papel del Estado y la convocatoria de Asamblea Constituyente para realizar una reforma estructural.
Medidas económicas
Entre sus medidas económicas y administrativas aboga por la reducción y simplificación de la carga tributaria, la privatización de empresas estatales que no son autosostenibles; la disminución del gasto en personal, la reducción de las leyes laborales y un régimen único de previsión, tanto para funcionarios privados como servidores públicos.
Finalmente, Luiz Felipe D’Avila, del Partido Novo, dividió en 10 metas su propuesta: Un nuevo Brasil para todos y coloca el medio ambiente como prioridad en un eventual gobierno.
Como primera meta prevé la transformación de Brasil en la primera gran nación del planeta con la economía totalmente adaptada a la nueva era del carbono cero; y la apertura de la economía, reseñó Prensa Latina.
Fuente:AVN
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