Más de 2 mil familias sobreviven en refugios al aire libre en Paraparal

Aún están presentes en el colectivo aragüeño los estragos causados por la crecida del lago los Tacarigua, innumerables comunidades afectadas, algunas que desaparecieron y la acción del Gobierno Nacional y regional parece seguir en deuda con los afectados.

Calles inundadas de aguas putrefactas se consiguen a lo largo de la poligonal

En la comunidad de Paraparal, en el municipio Francisco Linares Alcántara del estado Aragua, más de dos mil familias siguen esperando ser adjudicadas con una vivienda digna que les permita mejorar su calidad de vida.

Durante un recorrido por la poligonal 1 de Paraparal, los vecinos explicaron que ya se han acostumbrado a la falla de los servicios públicos, las cloacas desbordadas, la falta de recolección de basura y la maleza abundante en los espacios comunes, esto es algo normal para la comunidad.

Este sector está conformado por unas 220 viviendas en situación de riesgo, ya que las aguas negras han colapsado el sistema de cloacas, además los terrenos han venido perdiendo consistencia por el nivel de humedad, producto de las lluvias y la cercanía con el lago.

ESPERANDO ADJUDICACIÒN DE SU VIVIENDA

Para Teresa Barreto, vecina de este sector, de encuentra a la espera de una vivienda adecuada que le permita ver crecer a su familia dignamente, sin embargo, este compromiso que hizo en su momento el gobernador Rafael Isea, junto al alcalde Alexis Zamora, no se ha cumplido.

“Vivimos en este sistema de refugio al aire libre, que según lo que nos explicaron en su momento, es que íbamos a estar en nuestras casas hasta que el Gobierno tuviera listas las viviendas para reubicarnos,ya que no había disponibilidad para ese momento”, explicó Barreto.

Recordó la vecina que mientras los años pasan, las calamidades también se han ido incrementando en el sector y por eso le hace un llamado al alcalde del municipio a que les brinde una atención urgente.

“Estamos esperando por el alcalde para realizar los trabajos de sustitución de tuberías de aguas servidas, él nos dijo que no había llegado el material, pero ya la comunidad está dispuesta para hacer el trabajo y tener una mejoría en el sector, por lo menos con el tema de las aguas servidas”, acotó la afectada.

Recordó la afectada, que el tema de las lluvias sigue manteniendo en vilo a los habitantes, “las lluvias inundan las calles y esto genera preocupación en los residentes, pero el sistema de rebombeo se encarga de mantener y absorber el agua, evitando daños mayores; el único problema es que estas bombas no pueden estar mucho tiempo trabajando por temor a que se quemen o los bajones de luz terminen dañándolas”, indicó la vecina.

TODO ESTÁ NORMAL

Esta condición de vida se ha extendido por varios años, lo que ha generado en los vecinos una situación de adaptación en la comunidad.

Para Orlando Mendoza, comerciante del sector, la situación es normal, “todo está fino”, señaló el vecino sentado frente a una tanquilla donde se desbordan las aguas putrefactas, donde tiene una venta informal de alimentos.

Todas las aguas negras van a dar a un pozo que está colapsado

Al ser consultado sobre las lluvias, explicó que ciertamente se inundan algunas calles, pero al prender las bombas el agua baja y todo queda bien, lo mismo ocurre con los botes de aguas negras, son situaciones a las que nos acostumbramos y sabemos que pasarán muchos años para que las corrijan”, explicó el entrevistado.

Recordó Mendoza que hay situaciones en la comunidad que se han vuelto cotidianas, como el crecimiento de la maleza en los espacios públicos, ya que la humedad del terreno impulsa este crecimiento descontrolado y las jornadas de desmalezamiento son muy escasas.

PIDEN MAYOR ATENCIÓN GUBERNAMENTAL

Debido a toda la tensión que han sufrido estos vecinos, el llamado a las autoridades es para que les garanticen atención social para llevar una mejor vida, temas como el gas, el agua potable y jornadas de atención social son parte de los pedidos que hacen los residentes.

Norma García explicó que el gas llega cada tres meses, “no hemos tenido apoyo en los últimos días en el caso de las lluvias, con el tema de las aguas servidas la respuesta ha sido inexistente, lo mismo pasa con la recolección de basura, aquí el servicio es irregular y esto obliga a los habitantes a dejar las bolsas en los estacionamientos o zonas comunes de la Poligonal y estas se han convertido en vertederos improvisados”, relató.

Mientras la ayuda llega o se cumple la adjudicación de las viviendas a estas familias, el llamado a las autoridades es a desplegar equipos de apoyo social que les brinden beneficios y ayuden a mejorar su calidad de vida.

MAURICIO BOLÍVAR | elsiglo
fotos | JOEL ZAPATA