En el atentado cometido hoy cerca de la embajada rusa en Afganistán falleció el segundo secretario y un guardia de seguridad de la legación, según indicó el Comité de Instrucción de Rusia en base a informaciones preliminares.
“El 5 de septiembre de 2022, un artefacto explosivo fue detonado cerca de la sección consular de la embajada de Rusia en Kabul (…). Según datos preliminares, en el ataque murieron el segundo secretario y el guardia de la embajada”, indicó el presidente de esta institución adscrita al Kremlin, Alexandr Bastrikin.
Previamente el Ministerio de Exteriores solo había indicado que dos empleados de la embajada rusa en Kabul murieron en el atentado, pero sin informar de sus cargos o de su nacionalidad.
El jefe del Comité de Instrucción de Rusia ordenó al Departamento Principal de Investigación que abra un caso penal por la muerte de los dos empleados de la legación rusa en la capital afgana, según indicó el Ministerio de Exteriores en un comunicado.
Bastrikin también pidió que se investigue lo sucedido en coordinación con el ministerio que dirige Serguéi Lavrov y las fuerzas del orden de Afganistán, “a fin de identificar a todos los involucrados en el crimen”.
El Kremlin ha condenado el atentado, mientras que Lavrov instó a juzgar en un “futuro próximo” a los autores del mismo.
Además de los dos empleados rusos de la embajada fallecieron al menos otras cuatro personas, de nacionalidad afgana, y otras once resultaron heridas.
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El atentado suicida se produjo cuando el atacante cargado con explosivos fue descubierto y abatido por las fuerzas de seguridad de los talibanes en las inmediaciones del recinto.
La carga que llevaba el atacante suicida se detonó en la calle tras ser descubierto por las autoridades “antes de que llegara a su objetivo”, dijo a Efe el jefe policial de la zona, Malavi Saber.
De acuerdo con el portavoz policial, “el terrorista suicida fue abatido a tiros primero por las fuerzas de seguridad y por eso se produjo la explosión”.
Los talibanes aseguraron que sus agencias de seguridad están realizando una investigación exhaustiva sobre el incidente y “tomarán medidas más serias para la seguridad de la embajada”.
De momento ningún grupo armado ha reivindicado la autoría del ataque, aunque el grupo yihadista Estado Islámico suele estar detrás de estos atentados, convertido en la principal amenaza desde el regreso de los talibanes al poder hace un año.
Rusia fue uno de los primeros y pocos países en defender el acercamiento con los talibanes, pese a no contar con el reconocimiento de la comunidad internacional.
Aunque Moscú tampoco ha hecho oficial su reconocimiento del régimen de los fundamentalistas -es considerado un grupo terrorista en Rusia- es una de las pocas naciones que mantiene activo su servicio diplomático en Afganistán.
FUENTE: EFE
