Por más de tres años vecinos de La Coromoto viven entre las aguas negras

Vecinos de la avenida 106 de La Coromoto, municipio Girardot del estado Aragua, denunciaron que desde más de tres años viven con las aguas residuales frente a sus viviendas y hasta en los patios.

Mencionaron que en varias oportunidades autoridades del estado han realizado inspección en la comunidad, sin embargo, no les han dado ninguna respuestas a la problemática, la cual con el paso de los días lo que hace es empeorar mucho más.

Al respecto, José Vicente Barrios mencionó que en algunas viviendas el colapso es tal que ya no pueden utilizar sus baños, “todos los días el agua putrefacta la tenemos en las calles, vivir con ese olor a diario es insoportable, en algunas casas no se puede ni utilizar los baños y en los patios tienen aguas negras”.

También te puede interesar: En San José viven como “camellos” por la falta de agua

Asimismo, indicó que temen con que el colapso empeore, “los mismos vecinos nos la hemos tenido que ingeniar para tapar los huecos en las calles, tenemos miedo que algún carro caiga en alguno de ellos, o mucho peor, que el asfalto termine de ceder y se haga un enorme hueco”.

Por su parte, Miguel García manifestó que recientemente un grupo de vecinos se dirigieron hacia la Gobernación del estado y la Alcaldía de Girardot, donde expusieron la problemática, “en ese momento sólo nos dijeron que no había presupuesto para resolver, pero entonces nosotros tenemos que seguir viviendo con las aguas negras”.

García resaltó que este colapso de las aguas negras ha ocasionado enfermedades, “tener ese olor todos los días se ha convertido en un dolor de cabeza, además de los mosquitos y zancudos que producen esas aguas putrefactas, algunos niños han presentado enfermedades de la piel y respiratorias”.

Por último, los vecinos denunciaron que en las noches la calle se encuentra oscura lo que empeora la situación, por lo que solicitaron que después de tres años, las autoridades se aboquen a solventar este problema que afecta a un gran número de familias de la comunidad de La Coromoto.

MÓNICA GOITIA | elsiglo