El daño de las mentiras en las relaciones

Las mentiras en las relaciones pueden llevar a las personas a caer en un estado de inseguridad, rabia y angustia constantes. También pueden llevar a perder la confianza e incluso el amor por otra persona. Por este motivo, es importante saber cómo lidiar con ellas.

Las mentiras han formado parte de la vida desde el inicio de los tiempos. Por ello, es cada vez más común encontrar personas con el hábito de ocultar la verdad en diversas situaciones. 

Pero, aunque esta conducta está normalizada, el engaño puede llegar a hacer mucho daño en las relaciones de pareja, ya lo veíamos en la fábula de Pedro y el lobo. Las mentiras en las relaciones generan duda y desconfianza. 

Esto trae como consecuencia la inseguridad en el otro y afecta a la convivencia a largo plazo. La buena noticia es que este daño es reparable si se identifica a tiempo. En este sentido, para ayudar a las parejas a reconocer y superar este tipo de problemas, a continuación vamos a mostrar algunos consejos útiles para tratar la mentira en la pareja. 

¿Cómo afectan las mentiras en una relación? 

La mentira genera efectos negativos en la pareja, como el estrés, la angustia y la baja autoestima. Por otra parte, también acarrea otra serie de consecuencias negativas, que se puntualizan a continuación:

  • Pérdida de confianza entre las partes de la pareja. 
  • Inseguridad constante. 
  • Rabia y angustia. 
  • En algunos casos se genera obsesión por buscar más mentiras.
  • Sentimiento de decepción. 
  • Pérdida de respeto. 
  • Frustración.
  • Fallos en la comunicación. 
  • Celos.
  • Tensión en la relación. 

Mentir es la acción de ocultar o tergiversar la verdad para evitar que otra persona se entere de algo que no se desea compartir. Muchos expertos también lo interpretan como una burla hacia la persona a la que va dirigida la mentira, aunque no sea de forma intencionada. 

Al mentir, se considera que la otra persona es muy ingenua como para darse cuenta de que se le está ocultando algo. En ese momento se toma un papel de falsa superioridad que puede llevar a la repetición de la conducta. De esta forma, se convierte en un hábito recurrente con el que se corre el riesgo de entrar en un bucle interminable. 

¿Cómo actuar ante la mentira en la pareja?

Siempre que exista la sospecha o la certeza de que una de las partes de la pareja está mintiendo, es necesario tener una conversación en la que se aborde el tema. Antes de hablar, puede ser bueno valorar la importancia de la mentira, ya que no todos los engaños son iguales, y en algunas ocasiones, hay motivos de peso que llevan a ocultar la verdad. 

Si se decide perdonar las mentiras en la pareja, se debe estar convencido de que vale la pena conservar esa relación. Cuando este es el caso, es importante aprender a vivir con los recuerdos del engaño y dejar que desaparezcan poco a poco con el tiempo. La venganza tampoco es la solución, ya que devolver el daño recibido no hará que los malos sentimientos desaparezcan. 

No hay que obsesionarse con las mentiras si se decide perdonar un engaño, estar siempre en alerta para evitar que vuelva a suceder solo aumentará el estrés. Los reproches constantes tampoco ayudarán en nada, por lo que si ya se habló del tema, recordarlo solo empeorará la situación. 

Cuando se perdonan las mentiras en las relaciones hay que enfocarse en el presente. Si no se puede asumir esto, lo mejor es seguir adelante por caminos separados. Si el pasado no deja disfrutar el momento es porque el engaño es algo imperdonable y no hay marcha atrás. 

Las mentiras en las relaciones pueden llegar a generar un daño profundo e irreparable. Esta es una de las razones más comunes por las que se pierde el amor, y sobre todo, la confianza. Por este motivo, siempre es mejor escoger la vía de la honestidad, y optar por una relación sana y transparente.