Comerciantes deben adecuarse contablemente al IGTF

La entrada en vigencia de la nueva Ley de Impuesto a las Grandes Transacciones Financieras (IGTF) supone para los venezolanos un aumento inmediato de los artículos y servicios que se manejan en divisas.

Así mismo representa un intento del Gobierno por controlar el flujo de dólares que hay en la calle, aunque han expresado que su motivación es la de recuperar el valor del Bolívar, frente a la moneda americana, que circula libremente en nuestro país.

Para el presidente de la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción en el estado Aragua, (Fedecámaras) Pier Luigi Michelangelo, este impuesto es como un IVA a los pagos en divisas, viene a complicar un poco la administración de los negocios, ya que la persona debe manifestar con antelación la forma de pago.

Si un consumidor va a cancelar en divisas, habrá que hacerle una factura con el importe en divisas y el cobro del impuesto, la alícuota del 3%. Ahora bien, qué va a pasar cuando el cliente no exprese nada durante el proceso de compra y al momento de pagar manifieste su intención de cancelar en divisas, tendrá el comerciante que anular la factura y elaborar una con el impuesto.

Por supuesto que hay múltiples situaciones que pasan a cada rato en los establecimientos comerciales y que merecen la atención de los dueños al momento de facturar.

Otra situación será cuando un cliente tenga la mitad del monto del artículo en divisas y el resto en tarjeta de débito. «En este caso hay que hacer una factura con el impuesto en divisas al monto que cancelará con esta moneda y otra factura con el momento que cancelará en bolívares, por supuesto que esto se irá corrigiendo con el tiempo», expresó Michelangelo.

LOS IMPUESTOS HAY QUE PAGARLOS

A juicio del dirigente empresarial, este proceso de impuesto es sencillo para el cliente; sin embargo, para la administración de la empresa tendrá sus desafíos, «hay que realizar ajustes contables, modificaciones en las cajas fiscales, capacitar al personal, todo esto tendrá un costo implícito que en primera instancia la asume el comerciante, pero luego la trasladará a los productos y servicios, produciendo una leve alza en los precios», determinó.

Michelangelo recordó que este impuesto es una opción que se plantea el Gobierno nacional para hacerle frente al gasto público.
La implementación de este impuesto requiere una evaluación detallada por parte del equipo económico del Gobierno, quienes deberán determinar el éxito de este cobro, así como la adaptación que han tenido los comerciantes con esta herramienta.

DETERMINAR LA VIALIDAD
Aún es pronto para determinar el impacto que este impuesto puede tener en la economía venezolana, sin embargo, hay que aclarar que hay un aumento del gasto público con este recién aumento de salario, por lo que habrá movimiento económico en la calle.

«Estoy convencido que el movimiento en la economía se está incrementando, hay nuevos salarios, hay una economía cambiaria con mayor apertura, todo esto genera un nuevo impacto en el consumo, por lo que creo que este impuesto será absorbido por la economía y se fortalecerá el bolívar, que es lo que está buscando el Gobierno», apuntó.

LIMITACIÓN DE VENTAS EN BOLÍVARES
Expresó el presidente de Fedecámaras que a nivel comercial no ve variable esta situación, ya que el fin de los comerciantes es vender, por eso ve con recelo que muchos empresarios adopten como política no acepar divisas, «tal vez lo harán por un momento mientras adecuan su plataforma, o tal vez lo hagan porque sus productos son de primera necesidad y las personas buscarían los bolívares para pagarle; sin embargo, creo que al momento que sienta una merma en sus ventas volverá a aceptar divisas y tendrá que pagar el impuesto.

Tenemos que entender que uno como empresario debe darle la mayor facilidad al cliente para que consuma y si aceptar divisas satisface al cliente, entonces hay que hacerlo».

INCREMENTO DE LOS PRECIOS
Recordó el empresario que el impacto de este impuesto se sentirá hasta en los negocios pequeños, ya que el mismo es parte de una dinámica económica, el bodeguero en algún momento tendrá que comprar productos y su proveedor le cobrará el impuesto o previamente pagó el impuesto al adquirir bienes y productos, por ello ya esta cadena de cobro se activa con el IGTF y al final de la cadena el consumidor paga su alícuota.

REMESAS EXENTAS DEL IGTF
Explicó Michelangelo que las remesas que llegan por empresas de esta área como Zoom, ya ellas están pechadas con una alícuota del 2%, por esta razón no habrá un nuevo cobro, también está exento el pago del impuesto cuando se use tarjeta de débito respaldada en dólares, ya que el monto de la transacción el banco le transfiere al comerciante el pago en bolívares.

INCENTIVAR EL USO DEL BOLÍVAR
Durante la conversación con el empresario, se presentó la interrogante recogida por varios consumidores, de que algunos comerciantes al momento que fueron a pagar en divisas, ellos tomaron los dólares, le dieron los bolívares a la tasa del Banco Central y pudieron cancelar sin inconvenientes, quisimos saber si esta es una forma de fraude o evasión del impuesto.

Michelangelo expresó que el objetivo del Gobierno es incentivar el uso del bolívar como herramienta de pago, a su juicio esta acción no puede ser considerada un fraude o una maniobra de evasión, ya que una persona puede negociar libremente sus dólares, «Desde que se derogó el decreto de ilícitos cambiarios, entre el comerciante y el cliente pueden hacer una compra y venta de divisas libremente, no veo un fraude ahí», mencionó.

Existen varios mecanismos de venta de divisas y este es uno de ellos, por eso no se puede considerar un fraude, la idea es que se fortalezca el bolívar y exista una normalidad en los precios. Sin embargo, mencionó que los comerciantes para evitar cualquier situación extraña y atendiendo a las leyes venezolanas, tiene que hacer sus operaciones de compra y venta por medio de las entidades bancarias.

MAURICIO BOLÍVAR | elsiglo