Dos adolescentes han sido detenidos en Manchester, en el norte de Inglaterra, como parte de la investigación sobre la toma de rehenes en una sinagoga de Texas (EEUU) el pasado sábado; informó este lunes la Policía británica.
Los adolescentes permanecen retenidos después de que el británico Malik Faisal Akram, de 44 años, fuera identificado como responsable de la toma de rehenes; en un incidente que duró varias horas y en el que el autor perdió la vida tras ser abatido por la Policía.
La Policía del llamado Gran Manchester comunicó que agentes de la unidad antiterrorista del noroeste de Inglaterra arrestaron a dos jóvenes; cuyas edades o identidades no han sido facilitadas.
Akram, originario de Blackburn, en el norte de Inglaterra, había llegado hace dos semanas al aeropuerto internacional John F. Kennedy, en Nueva York; y después compró el arma que utilizó en la sinagoga, de acuerdo con las fuerzas del orden estadounidenses.
El canal de noticias CNN señaló por su parte que «se escuchó un fuerte estallido». Acto seguido, mencionaron que hubo «una breve ráfaga de disparos desde la dirección de la sinagoga»; según información de corresponsales en la zona del suceso.
Rehenes, el FBI y los perpetradores
Un primer rehén había sido liberado este sábado a las 17:00 horas locales (23:00 GMT) con buena salud después de más de seis horas retenido. Entretanto, el FBI continuaba negociando con el sospechoso del crimen, informó la Policía local.
De acuerdo con una fuente policial consultada por la CNN, al comienzo del secuestro había al menos cuatro rehenes dentro de la sinagoga de la congregación Beth Israel, en Colleyville; y uno de ellos era un rabino.
Según funcionarios estadounidenses citados por las cadenas CNN, ABC y NBC; el sospechoso asegura ser el hermano de la científica pakistaní Aafia Siddiqui, encarcelada en una base aérea estadounidense cerca de Colleyville
En sus negociaciones con agentes de EEUU, que duraron horas, Akram pidió la liberación de la científica pakistaní Aafia Siddiqui, que cumple en Texas una condena de 86 años de prisión por haber tratado de matar a soldados y agentes estadounidenses mientras estaba detenida en Afganistán.