Las fuerzas de seguridad de los talibanes arrestaron hoy al profesor universitario Faizullah Jalal, uno de los más destacados críticos del régimen fundamentalista en la ciudad de Kabul, denunciaron sus familiares.
“Hoy las fuerzas talibanes arrestaron al doctor Faizullah Jalal en su casa y lo llevaron a un lugar desconocido. Como profesor universitario, Jalal ha luchado y se ha pronunciado por la justicia, los derechos humanos y los intereses nacionales”, publicó en un comunicado la familia del académico.
El arresto de Jalal provocó la condena de organismos nacionales e internacionales de derechos humanos, que pidieron al Gobierno talibán que lo libere de manera inmediata y sin condiciones.
Amnistía Internacional (AI) rechazó la detención del profesor universitario que, dijo, está siendo castigado “por ejercer su libertad de expresión y criticar a los talibanes en un programa de televisión”.
“Hacemos un llamamiento a las autoridades talibanes para que lo liberen de inmediato y sin condiciones”, indicó el organismo internacional en su cuenta en Twitter.
Activistas de derechos humanos y trabajadores sociales expresaron también su indignación por el arresto.
“La historia está llena de presos, desapariciones físicas y desapariciones políticas, pero más presión significa más resistencia y un día el poder volverá al pueblo de Afganistán”, publicó en Twitter la activista y líder política Fouzia Kofi.
Familiares y allegados de Jalal manifestaron su preocupación por la vida del profesor y han pedido a los medios de comunicación que alcen la voz para pedir su liberación.
“Por favor, levante la voz para liberar a mi padre sano y salvo”, dijo los medios su hija, Muhsa Jalal.
Hasta el momento, el Gobierno de los fundamentalistas no ha hecho comentarios sobre el arresto. Sin embargo fuentes del régimen citadas por medios afganos aseguran que Jalal fue apresado por insultar al liderazgo del Emirato Islámico, como se denominan los talibanes.
Los talibanes llegaron al poder el pasado 15 de agosto tras su victoria en la guerra, conseguida al tiempo que las fuerzas estadounidenses completaba la retirada del país.
Los fundamentalistas formaron un Ejecutivo copado en su gran mayoría por religiosos y miembros de su organización, de la mayoritaria etnia pastún y sin representación apenas de otras comunidades o sectores de la sociedad.
Con todo el país bajo su control, los talibanes han reprimido con violencia la mayoría de las protestas en su contra y decenas de medios ha cerrado, entre otras presiones, por el temor a los ataques de los talibanes.
Miles de activistas, periodistas y representantes sociales han huido del Afganistán en los últimos meses y muchos de los que permanecen en el país aseguran que temen por sus vidas.
