El Parlamento iraquí reeligió este domingo al presidente de la Cámara baja, Mohamed al Halbusi, dando así comienzo al complicado proceso de formación de Gobierno, dificultado por los desacuerdos entre la gran variedad de facciones y sectas que conforman el Legislativo.
La televisión estatal iraquí Al Iraquiya anunció que Mohamed al Halbusi presidirá de nuevo la cámara después de obtener 200 de los 228 votos de los diputados que asistieron a una sesión marcada por un enfrentamiento.
El protagonista del altercado fue el otro candidato a la presidencia del Parlamento, Mahmud al Mashhadani, que al ser el diputado más longevo de la cámara con 73 años fue el encargado de inaugurar la sesión en la que debía salir elegido el próximo presidente del órgano.
Al Masshadani fue hospitalizado después de ser agredido por un diputado del Bloque Sadrista, el más votado en las elecciones del pasado 10 de octubre, cuando decidió levantar la sesión para deliberar sobre las votaciones, dijo una fuente parlamentaria a Efe en condición de anonimato.
Después del altercado, la sesión se reanudó bajo el liderazgo de Jaled al Daraji, el segundo legislador de mayor edad, y Mohamed al Halbusi, líder del mayor partido suní de Irak, Taqaddum, fue reelegido como presidente del Parlamento.
De acuerdo con la Constitución iraquí, en su primera sesión los legisladores deben prestar juramento constitucional y elegir a un presidente de la cámara. Luego tienen un plazo de 30 días para designar al próximo presidente de la república.
Este deberá encargar, antes de idéntico periodo de tiempo, la formación de Gobierno al candidato propuesto por el grupo mayoritario en el Legislativo para primer ministro, el cual tendrá otros 30 días para conformar su Gabinete y lograr la aprobación del Parlamento.
Según el sistema sectario establecido en Irak tras la caída del dictador Sadam Husein, el presidente del Parlamento debe ser un musulmán suní, el primer ministro un chií y el jefe de Estado, kurdo.
