La elección del líder conservador Silvio Berlusconi como presidente de la República italiana sería “una doble victoria para Italia y la Unión Europea”, asegura el eurodiputado y secretario general del Partido Popular Europeo (PPE), Antonio López-Istúriz, para quien un tándem con el actual primer ministro, Mario Draghi, convertiría al país en “invencible”.
“Una presidencia de Silvio Berlusconi con un jefe de Gobierno como Mario Draghi sería invencible y promovería a Italia aún más de la ya elevada posición de la que goza. Berlusconi y Draghi harían de Italia el país líder”, dice López-Istúriz en el diario italiano “Il Giornale”, perteneciente a la familia del magnate italiano.
En su opinión, ambos “son los únicos líderes realmente conocidos y apreciados en Europa”.
Draghi y Berlusconi son los nombres que más suenan como posibles sustitutos del actual jefe del Estado, Sergio Mattarella, que termina su mandato en tres semanas, por lo que el Parlamento se reunirá en sesión conjunta a partir del próximo 24 de enero para designar al próximo presidente.
Berlusconi está moviendo todas sus fuerzas para llegar al Quirinal -la sede de la presidencia de la República- a pesar de que sobre el papel no cuenta con los apoyos suficientes y el próximo viernes confirmará o no su candidatura, tras reunirse con los otros dos líderes del centroderecha, los ultraderechistas Matteo Salvini y Giorgia Meloni.
Con Berlusconi al frente de la jefatura del Estado italiano, “la Europa política sería aún más fuerte y creíble. Hoy, por ejemplo, creo que es vital mantener relaciones inteligentes con Rusia, porque es un momento muy delicado que implica preocupaciones por la paz y preocupaciones por el suministro energético”, añade López-Istúriz, que destaca que el líder italiano “mantiene un diálogo constante” con el presidente ruso, Vladímir Putin.
El también miembro del Comité de Asuntos Exteriores del Parlamento Europeo destacó la “máxima competencia en las relaciones internacionales” de Berlusconi, que le ha agradecido sus palabras.
