El viceministro de Temas Multilaterales de la Cancillería venezolana, Rubén Darío Molina, afirmó este miércoles que el Gobierno espera mantener en 2022 “un relacionamiento muy respetuoso y constructivo” con el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
Así se pronunció Molina tras sostener una reunión con el jefe de la delegación del CICR en Venezuela, Arnaud de Baecque, en la que hicieron un balance de fin de año de la cooperación y de la asistencia técnica que recibe el país caribeño, recoge un comunicado de la Cancillería.
Además, revisaron los elementos que se van a seguir trabajando durante en 2022 “bajo un relacionamiento muy respetuoso y constructivo”.
Recientemente, Venezuela y el CICR firmaron la renovación del acuerdo de cooperación en materia de agua potable y saneamiento para el periodo 2021-2023, con el objetivo de garantizar la atención del pueblo; frente a las medidas coercitivas unilaterales impuestas por el Gobierno de los Estados Unidos contra el país.
Venezuela y el CICR renovaron el acuerdo de cooperación en materia de agua potable y saneamiento para el periodo 2021-2023; con el objetivo de garantizar la atención de los ciudadanos.
El CICR es una organización independiente y neutral que brinda protección y asistencia humanitaria a las víctimas de conflictos armados y otras situaciones de violencia; y promueve el respeto del derecho internacional humanitario.
CICR ¿Quiénes son?
El CICR, fundado en 1863, trabaja en todo el mundo para prestar ayuda humanitaria a las personas afectadas por los conflictos y la violencia armada; y para promover las leyes por las que se protege a las víctimas de la guerra.
Es una Institución independiente y neutral; su cometido dimana esencialmente de los Convenios de Ginebra de 1949.
Sito en Ginebra, Suiza, emplea a unas 20.000 personas en 100 países; su financiación estriba principalmente en los donativos voluntarios procedentes de los Gobiernos y de las Sociedades Nacionales de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja.
