El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, destacó hoy ante los líderes de los países que conforman el G20 los “desafíos” para un crecimiento económico mundial más “estable” y “equitativo” tras la pandemia del coronavirus y defendió un comercio internacional “libre” de medidas “discriminatorias”.
“Gradualmente, nuestras economías se recuperan a medida en que la crisis sanitaria es superada. Esos dos procesos de recuperación caminan lado a lado”, señaló el mandatario brasileño en su discurso en la cumbre del G20 en Roma.
Bolsonaro apuntó que, para ello, es necesario promocionar un comercio internacional “libre de medidas distorsionadas y discriminatorias” e instó a un flujo “cada vez mayor” de comercio e inversiones a fin de promover la integración de las mayores economías globales y el desarrollo sostenible.
“El histórico acuerdo concluido por el G20 y otros países sobre tributación internacional, en el ámbito de la OCDE, es también una contribución significativa para la sustentabilidad fiscal y económica”, agregó.
El presidente brasileño afirmó además que su país está “comprometido” con la inversión de recursos públicos en programas sociales destinados a la población más vulnerable, así como con reformas estructurales “esenciales” para una “retomada económica sustentada”.
Bolsonaro considera la pandemia
Sobre la emergencia sanitaria, Bolsonaro, uno de los gobernantes más negacionistas frente a la gravedad del coronavirus y quien aún no se ha vacunado; subrayó que “los esfuerzos del G20 deberían centrarse en el combate a la actual pandemia”.
“Entendemos, por tanto, que cabe al G20 esfuerzos adicionales por la producción de vacunas, medicamentos y tratamientos en los países en desarrollo”, destacó.
Vacunas
Bolsonaro igualmente citó que más de la mitad de la población ya ha completado el ciclo de inmunización contra la covid-19 en Brasil; uno de los países más castigados por la crisis sanitaria y que ya acumula más de 607.000 muertos y 21,7 millones de infectados.
El primer ministro italiano; Mario Draghi, abrió hoy la cumbre del G20 de Roma con un llamamiento a los líderes para una mayor colaboración internacional para afrontar la pandemia; la recuperación económica global; luchar contra el cambio climático y, en definitiva, construir un “nuevo modelo económico, del que el mundo se beneficiará”.