Rusia puede retener en los almacenes de sus yacimientos agotados hasta 1,7 billones de toneladas de CO2, mientras que sus bosques tienen la capacidad de absorber 2.500 millones de toneladas de CO2 anuales, declaró hoy el presidente de Rosneft, Ígor Sechin.
“Según valoraciones de especialistas, el potencial de almacenamiento geológico es de 1,7 billones de toneladas de CO2”, afirmó durante una sesión del XIV Foro Económico Euroasiático dedicada al futuro de la energía.
El presidente de la mayor petrolera rusa indicó que el país “ya hace un aporte considerable a la absorción del dióxido de carbono por medio de los ecosistemas, en particular los bosques; que tienen un potencial de absorción de 2.500 millones de toneladas anuales”.
Sechin anunció que Ronseft está preparando una nueva estrategia que priorizará la adaptación de los retos del cambio de fuentes energéticas y la integración de las tecnologías verdes y el empresariado.
“Rosneft estudia el uso de estas medidas de compensación”; afirmó, en referencia al uso de los yacimientos agotados y el potencial de absorción de los bosques en conformidad que el plan ruso de gestión de las emisiones hasta 2035.
Emisiones de gas
“Este plan marca una serie de objetivos ambiciosos en materia de decarbonización: la compañía se compromete a reducir las emisiones durante la prospección y explotación en un 30 % y evitar la emisión de 20 millones de toneladas de gases de efecto invernadero”; afirmó.
Además, Rosneft se compromete a “reducir la intensidad de emisiones de metano y reducir a cero la combustión de gas acompañante”, afirmó.
“Paralemamente valoramos las perspectivas de un amplio abanico de posibilidades de gestión del dióxido de carbono; tanto el uso de fuentes de energía renovables como el uso de tecnologías para la absorción de CO2 y el desarrollo del uso del hidrógeno”; añadió.
Destacó que actualmente Rosneft incrementa la extracción del combustible fósil más ecológico, el gas natural.
Planes en Rusia
“Tenemos previsto ampliar su extracción a más del 25 %” del total de las producciones, indicó; al señalar que Rosneft lleva a cabo un programa de reciclado del gas acompañante; desarrolla combustibles ecológicos y una red para recargar automóviles eléctricos.
Sechin añadió que en 2020 las inversiones “verdes” de Rosneft superaron los 580 millones de dólares; mientras que las emisiones contaminantes se redujeron en un 14 % respecto al año anterior.
Además, afirmó que la compañía plantó este año 9,3 millones de árboles con el fin de incrementar la absorción de CO2.
Rusia, el cuarto emisor de gases de efecto invernadero del mundo; aspira a reducir las emisiones en un 20 % para 2024 y alcanzar la neutralidad climática en 2060.
