Quienes hacen vida en la calle 4 de la comunidad de La Mora, ubicada en La Victoria, municipio Ribas, manifestaron vivir en completa oscuridad al caer la noche, debido a que el alumbrado público de la zona se encuentra en un completo estado de decadencia, lo que no les permite tener un nivel de vida digno y tranquilo como está establecido en las leyes venezolanas.
En este sentido, explicaron los afectados que toda la vía y hasta sus trasversales se encuentran en la penumbra, ya sea porque algunos postes de electricidad no cuentan con bombillos o porque las fotoceldas presentan inconvenientes, que los tiene alumbrando de día y apagados de noche.
“Cuando oscurece esto es impresionante de lo tenebroso que es. Uno que otro bombillo enciende, del resto todos están apagados, la única forma que por aquí pasaran colocando bombillos es cuando había campaña política, pero eso quedó en el olvido, porque hasta ahora no ha venido ni un candidato a conversar con nosotros, pese a que las elecciones ya son en noviembre y hay un candidato de la zona”, indicó María Pérez, al mismo tiempo que destacó que de noche les da pánico salir a consecuencia de la misma dificultad.
“La falta de alumbrado aumenta la delincuencia, pero sí influye mucho a la hora de realizar un robo y más en estos tiempos que uno no sabe quién es quién con esos tapabocas, lo mejor es no salir de sus casas y prevenir”, agregó Pérez.
De la misma forma, Pedro Gutiérrez aseguró que el inconveniente no sólo era evidente en la calle, sino también en las viviendas, ya que cada vez que lleve o cortan la luz, que es una o tres veces al día de manera abrupta, no sólo dañan los postes, sino también los de las casas, esto sin dejar a un lado el daño de los electrodomésticos.
“De verdad esto es feo en las noches y madrugadas, vivimos como palo de gallinero y ahora con las suspensiones del sistema eléctrico cada vez que les da la gana, quedamos más con los nervios de punta. De verdad, es un aspecto negativo que debe ser atacado a la brevedad de lo posible”, puntualizó Gutiérrez.
Para finalizar, los lugareños esperan que los entes competentes, realicen una jornada de alumbrado público y que no sólo sea colocar los bombillos, ya que los postes necesitan reparación y mantenimiento de primera mano, para que así los arreglos duren y no sean pañitos de agua tibia.
DANIEL MELLADO | elsiglo
