Para miles de millones de personas en todo el mundo, Facebook puede ser una fuente de fotos de bebés bonitos, de desinformación sobre vacunas y otras cosas más, y todo ello aparece en nuestros feeds con la ayuda de algoritmos.
Ahora, horas de testimonio y miles de páginas de documentos de la denunciante de Facebook Frances Haugen reavivaron el escrutinio del impacto que Facebook y sus algoritmos tienen en adolescentes, la democracia y la sociedad en general.
Las repercusiones han planteado la cuestión de hasta qué punto Facebook, y quizás las plataformas similares, pueden o deben replantearse el uso de una serie de algoritmos para determinar qué imágenes, videos y noticias ven los usuarios.
Haugen, exgerente de producto de Facebook con experiencia en «gestión de productos algorítmicos», centra sus críticas principalmente en el algoritmo de la empresa diseñado para mostrar a los usuarios los contenidos con los que es más probable que participen.
Según ella, este algoritmo es el responsable de muchos de los problemas de Facebook; como el fomento de la polarización, la desinformación y otros contenidos tóxicos.
En una aparición en el programa «60 Minutes»; dijo que al red social entiende que si hace que el algoritmo sea más seguro, «la gente pasará menos tiempo en el sitio, hará clic en menos anuncios y ganará menos dinero».
El CEO de Facebook, Mark Zuckerberg; ha rebatido la idea de que la empresa prioriza las ganancias sobre la seguridad y el bienestar de los usuarios.