Bolsonaro se cree dueño de Petrobras, denuncia expresidente de la estatal

El expresidente de la petrolera estatal Petrobras Roberto Castello Branco acusó al mandatario brasileño, Jair Bolsonaro, de querer “proceder” como si fuera el “dueño” de la empresa, “desobedeciendo reglas y regulaciones”.

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“El Gobierno se cree dueño de Petrobras, el presidente de la República dice que es el dueño de la empresa y quiere proceder como tal, desobedeciendo reglas y regulaciones”, dijo el economista en una entrevista divulgada este martes por el diario ‘Estadao’.

Castello Branco salió del mando de la petrolera después de ser objeto de duras críticas por parte de Bolsonaro, quien el pasado 19 de febrero anunció por sorpresa la designación del general retirado del Ejército Joaquim Silva e Luna para el cargo.

Esa decisión, según el exjefe de Petrobras, se debió a que el jefe de Estado “defendía los intereses de los camioneros autónomos”, que forman parte de la base social de apoyo a su Gobierno y en la época amenazaban con una huelga por las repetidas subidas en el precio de los combustibles.

Desplome de las acciones de Petrobras

El cambio en la dirección promovido por Bolsonaro, que posteriormente fue ratificado por los accionistas, provocó el desplome de las acciones de Petrobras y aumentó la desconfianza del mercado en su Gobierno.

Castello Branco también confirmó que, durante su gestión al frente de Petrobras (2019-2021), hubo intentos de interferencia política en la compañía, relacionados con “gastos de publicidad” y “nombramiento de personas”, que él rechazó, según manifestó en la entrevista.

De su sucesor, Joaquim Silva e Luna; exministro de Defensa, indicó que “no tiene conocimiento de cómo funciona una gran empresa, ni experiencia en la gestión de negocios”; y tampoco “sabe nada sobre petróleo, gas o combustibles”.

Bolsonaro sin convencer

Aunque le reconoció que desde que asumió “no trató de cambiar nada” en Petrobras, cuyas acciones cotizan en Sao Paulo, Nueva York y Madrid; aunque es de control estatal.

“Miró todo lo que iba bien y se tomó en serio ese dicho popular que dice que ‘un equipo que está ganando no se toca’; incluso porque sería arriesgado de su parte. Eligió no correr riesgos para no ser responsable de ningún desastre”, apuntó el economista.

Consideró que el Gobierno afronta dificultades para sacar adelante las reformas de corte liberal de su agenda económica porque, entre otros factores; a Bolsonaro no le convencen del todo.

“Al contrario, en algunos episodios, creo que hasta trabajó contra las reformas”, aseguró en alusión al líder ultraderechista. EFE