Karen Bibas: La pintura, los lienzos, los rodillos y mis espátulas son mis eternas compañeras en el transitar de mi vida

Karen Bibas  es una reconocida artista nacida en Colombia, donde logra desarrollar  su vida familiar y profesional  allí  se destacó por más de 14 años en el campo de la  educación preescolar.

Karen Bibas
Karén Vivas/Artista Nacional

Posteriormente  por algunas circunstancias muy traumáticas  en el aspecto personal con el intento de  secuestro de uno de sus hijos, se traslada a San José de Costa Rica,  y es en eso otro país que lo hizo suyo , donde deja  una impronta de lo que sería sus inicios y una trayectoria como artista visual.

 Ella también se ha dedicado  a consolidar una hermosa labor social, posterior a un episodio familiar que la hizo reencontrarse con una mujer muy humana, solidaria, emotiva y fuerte, porque logró con todo su férrea  entrega de madre y el de muchos, que su hija volviera a nacer a propósito de un implante de médula  que le hicieron en el Hospital  de Houston, Texas.

Ha participado en diversas exposiciones colectivas,   y su obra ha sido exhibida también  de forma individual en diversos países como su Colombia natal, San José de Costa Rica y Miami, entre otros.

Finalmente, decide  hacer  de la Ciudad de Miami, EEUU, su espacio de hábitat  de forma  permanente para seguir consolidando su obra,  donde actualmente   estudia Artes Visuales  en El Miami Art Institute.

La Obra y su Contenido

Al aproximarnos al trabajo artístico de Karen Bibas  apreciamos una  obra que refleja  atemporalidad. Es decir, puede ser un trabajo que de igual manera se acerca al pasado, que es parte del presente y que sin duda alguna se adelanta al futuro.

Su mundo parece estar en permanente cambio, nunca en reposo. Y ella es de esa clase de Seres Humanos que están absolutamente cómodos con el cambio y que lo disfrutan plenamente.

Totalmente inmersa, absorta y fascinada por todo lo que la rodea; Karen Bibas se integra a sí misma con lo “Otro”. Eso Otro puede ser lo que mira en sus viajes, pero puede ser también las imágenes de su mundo interior, sus vivencias estremecedoras.

Ella se concentra en todo aquello que es lo suficientemente interesante, como para retener completamente su atención. A través del Arte,  esta enérgica mujer  se encuentra con ella misma, pero también se hace capaz de ejercer toda su libertad.

Es por eso que en su trabajo artístico hay simultáneamente un recorrido por muchas técnicas, lenguajes y recursos de la Historia del Arte. Al tiempo que muestra un acercamiento a tendencias de todos los Tiempos.

Para tomar lo esencial de aquello que hace Resonancia con su búsqueda creadora. Que no es otra que la Expresión más pura de una Artista plenamente realizada, que hoy en día ha incorporado a su hacer artístico, toda su experiencia y conocimiento humano.

El carácter expresivo de la obra de Karen Bibas  desde el plano pictórico, es el fruto de una experiencia y un dialogo entre La obra y la artista,  es una propuesta  enérgica  y gestual con superficies llenas de color, con trazos  y gestos  dominantes, como un campo abierto sin límites; con una propuesta sólida lo que la catapulta en el medio de la creación a nivel internacional.

Vinculada al expresionismo, la artista  utiliza una paleta cargada de colores  con un gesto pictórico como una pulsión vital que surge del interior y cuya extensión es la mano como una expresión pura,  asumiendo las claves de un lenguaje  descriptivo en el que entran en juego las  percepciones y emociones de la artista  y mediante la  que trata de buscar equivalentes visuales para  propuestas  intangibles en algunos caso.

El gesto y su lenguaje en la pintura y la paleta que utiliza para el tratamiento de sus piezas son: rojo, amarillo, azul, verde, ocreas. Todo ello representado en pinturas y otras superficies y utilizando las mismas de variados formatos, que le permitan combinar una gama infinita con su paleta vibrante, ella entiende la creación artística como un ritual, desarrollando cada obra y logrando desatar sus estados de ánimo.


Karen Bibas  logra sumergir al espectador  en su interior y los hace partícipe de una experiencia mística. El color, más que la forma, es un elemento fundamental en la obra de  esta destacada artista

Su discurso sobre el gesto pictórico es esencial en cada pieza que construye Karén Bibas la pintora, ella mueve y desliza el pincel por la superficie de cada pieza, como el registro que éste deja en el lienzo u otro elemento. Así, podemos hablar de una creadora con una gestualidad vigorosa y potente que logra depositar la pintura con una maestría inusual.

Esta creadora hace  un uso muy   particular de la materia pictórica. La cual más allá de convertirse en un recurso meramente plástico en uso, adquiere en esta obra un protagonismo avasallante. Porque su Paleta impacta con las armonías, desde las cuales conforma los planos de la obra poco convencional, muy arriesgada en realidad.

KARÉN BIBAS Y SUS T1CNICAS EN EL ARTE

Construye las formas por los acercamientos entre los planos de color, que en un momento pueden formar figuras humanas y al siguiente forman ciudades imaginarias. De igual manera, expresionista es también su pincelada, que por su misma naturaleza no se sirve propiamente del pincel, sino de la espátula, del rodillo y de otros instrumentos.

Incorporando en ocasiones elementos extra pictóricos que enriquecen su propuesta; porque alcanzan un repertorio visual ilimitado, a lo ella expresa “la pintura, los lienzos, los rodillos y mis espátulas son mis eterna compañeras en el transcurrir de mi vida”.

Inagotable es su fuente de inspiración, tanto temática como técnica. El motivo de sus obras nos pasea por un amplio espectro de posibilidades tanto figurativas como abstractas. Por un lado es posible observar figuras humanas estilizadas y por el otro observar una geometría sensible, no rigurosa. Con la cual aborda paisajes y ciudades.

Para  esta reconocida artista  no hay ningún límite. Y es así como habiendo estudiado las técnicas artísticas convencionales, ha sabido experimentar con todo lo que encuentra a su alrededor mostrando un trabajo que desborda los límites de lo convencional y se adentra en un mundo fantástico. Habitado tanto por aquello que le es cercano a la Artista, como todo aquello que proviene de su interioridad.

Bibas   en su obra intenta desnudar apariencias para alcanzar la esencia, de hacer visible lo invisible, Karen Bibas  hoy por hoy es una artista del mundo y está  concentrada en la  investigación  visual de su obra  conformando  una propuesta de una  rigurosidad   conceptual y de muy alta factura estética,  por lo que decidimos entrevistarla para la página Arte y Ciudad del diario El Siglo, Maracay estado Aragua, Venezuela.

UNA ENTREVISTA, UNA GRAN ARTISTA, Y UNA DILATADA TRAYECTORIA.

YRG: ¿Qué motiva a Karen Bibas  a vincularse con la estética, y más nunca detener  tan prolífica  carrera en las Artes?

KB: Me vinculo por empezar una actividad nueva en mi país nuevo Costa Rica, donde me doy cuenta que cada vez que comienzo un lienzo blanco, puedo expresar mis sentimientos de forma terapéutica.


YRG: ¿De dónde nace tanta libertad en tu trabajo plástico?


KB: De las experiencias personales que he tenido que pasar durante los años, me han llevado a poder expresarlas en una tela.

YRG: Tus pinturas son frescas nada rigurosas, y queda siempre la imaginación abierta para el espectador, ante un colorido que amalgaman los trazos y la paleta en tus obras ¡Cuéntame! ¿Qué haces para que tu propuesta sea tan desenfadada?

KB: El colorido que utilizo es parte de mi personalidad, de una mujer guerrera que hace sentir identificados tanto a los espectadores femeninos como masculinos.

YRG: ¿Cómo es el proceso de tu trabajo con la obra, luego de preparar la tela con las materiales a utilizar en la misma?

KB: Trabajo de forma libre con paleta y rodillo, y dejo que mis sentimientos me guíen y me lleven a hacer trazos mientras me expreso.

YRG: ¿Háblame de tu vocación por el trabajo con los niños en tu hermosa ciudad natal Bogotá?

KB: Trabaje 14 años como educadora de preescolar con niños de 2 años y medio. Desde muy temprana edad me di cuenta que tenía un gran imán con los niños, y así sigue hasta el día de hoy.

YRG:¿Qué te hace migrar desde tu país Colombia para San José de Costa Rica?

KB: La situación política del país, y luego del intento de secuestro de mi hijo menor.

YRG: El pintor venezolano Armando Reverán decía “Cada hora es de un color distinto, y uno siente el paso de una a la otra”. Desde esa definición tan mágica, ¿Puedes tú apreciar en ese cambio de una hora a la otra: el juego de luces y sombras a través de las hojas de los árboles, disfrutar de los matices pintados en el cielo al amanecer o al atardecer?.


KB: Efectivamente, de una obra a otra, puede haber un cambio en la paleta de colores de cada una, y el estado anímico en el que el artista se encuentre en cada momento.

YRG: Observando tus piezas puedo visualizar una obra vigorosa y con mucha energía ¿Cómo surge la presencia de la luz en tu investigación visual?

KB: Me sumerjo en la obra como si estuviera presente allí y de ahí sale la luz.

YRG: ¿Es tú trabajo como una síntesis de una perspectiva que te apasiona, es ese punto en el que se concreta el maravilloso toque de magia de la vida que eres tú misma, en una imagen?

YRG: ¿Cómo manejas la memoria en tu caso como artista, qué te sugiere la misma desde los lugares, emociones o efectos cromáticos?

KB: Tomo fotos de ciudades y objetos que me llamen la atención y luego los integro en mis propios colores.

YRG: ¿Te has planteado abordar lo digital en tu propuesta?

KB: Si, ya lo he hecho. Tengo obras digitales impresas sobre metal.

YRG: Manejas varios formatos en diferentes formas en tus piezas, desde los más grandes, hasta los medianos, inclusive los pequeño, ¿Eso ocurre al azar, o es más placentero para ti?

KB: Realmente ocurre al azar, o en algunos casos a solicitud de algún coleccionista. Pero lo más placentero para mi es trabajar en formato grande.

YRG: ¿Pintas de noche o de día, o al momento que llegue la inspiración, como decía Picasso?

KB: No tengo horario especifico, realmente es cuando esté inspirada. Pero una vez que empiezo, no tengo límite. Me he quedado hasta ocho horas seguidas pintando. No importa la hora que sea, siempre estaré en tacones y de pie.


YRG: Si la magia de las artes está en la libertad que tienes para experimentar. ¿Qué te gustaría explorar más adelante en tu obra tan gestual y con esa paleta tan vibrante, dentro del lenguaje expresionista de tu obra?

KB: Ya lo empecé a experimentar. Estoy haciendo obras en tercera dimensión involucrando diferentes texturas y hasta pedazos de retazos de tela.

YRG: ¿Hay algún lazo común en tu obra? ¿Algo por lo que desees identificarla?

KB: Si, el colorido y el trazo con una personalidad definida realizada con rodillos y espátulas.

YRG: ¿Cuál es tu idea sobre la belleza en el arte?

KB: La belleza depende del ojo del espectador. Lo ven en diferentes ángulos de belleza.

YRG: En tu trabajo evocas alegría, felicidad, fuerza de vivir y tu relación con lo bello de lo etéreo, lo inmaterial del espíritu ¿Cómo diferencias, si es desde tu espíritu o es el de la naturaleza?

KB: En mis obras, no hay ninguna diferencia. Mezclo tanto el espíritu como la naturaleza para lograr la expresión en mis obras.


YRG: ¿Cuándo te ocurre un accidente azaroso trabajando tus obras desde lo estético, ¿Cómo lo resuelves?

KB: No necesariamente lo resuelvo. A veces es parte de la obra porque no hay casualidades sino causalidades. Lo integro dentro de la obra.

YRG: Resides en Miami ¿Qué te atrapa de esa vibrante ciudad para transferirlo a tus piezas?.

KB: La experiencia como estudiante nuevamente en artes visuales, eso me transporto a momentos muy alegres recordando mi juventud, ya que estudie con gente más joven que yo.

YRG: ¿Qué le debes a tu natal Colombia?

KB: Le debo mis primeros 30 años de vida donde conformé una familia con tres hijos, y mi formación como educadora de preescolar.

YRG: Karen, Gracias por platicar amenamente conmigo y poder hacer esta grata entrevista, ¿deseas agregar algo más?

KB: Gracias a ti por tomarme en cuenta para tu página Arte y Ciudad, me queda por contar que la primera obra que logre mercadear la adquirió un venezolano que creyó en mí,y con los años termino comprándome más obras.

Ydelisa Rincón González | el siglo