Descubren las huellas más antiguas de ancestros prehumanos en una isla griega

Hace 6 millones de años, un prehumano con un pie muy similar al nuestro caminó por las playas de Grecia y dejó las huellas más antiguas jamás encontradas.

Las playas de la villa de Trachilos, al oeste de la isla de Creta, podrían cambiar radicalmente todo lo que sabemos sobre los orígenes del humano y su expansión por todo el globo.

El primer hallazgo de huellas prehumanas en la zona ocurrió en 2002 y desde entonces, los sedimentos fosilizados de Trachilos amenazan con crear un parteaguas en la historia natural de nuestra especie conocida hasta ahora:

La datación más reciente concluye que un grupo de 50 huellas descubiertas en 2017 (y elaboradas por un ser vivo que caminaba erguido y poseía una planta del pie similar a la humana) tienen más de 6 millones de años y por lo tanto, se trata de la “evidencia directa más antigua de un pie humano utilizado para caminar”.

Para poner en perspectiva la importancia del hallazgo, los científicos comparan la datación de las huellas de Creta con las más antiguas conocidas hasta ahora, las de un Australopithecus afarensis del yacimiento Laetoli en Tanzania, fechadas hace 3.6 millones de años.

En busca de dilucidar qué especie caminó por la playa de Trachilos hace 6 millones de años, el equipo descartó que se trate del Homo sapiens y la otra especie de humano más reciente, el Neandertal, que desapareció hace aproximadamente 40 mil años.

Y aunque se propuso que los sedimentos podrían ser rastros de Australopithecus, las huellas describen un pie más corto que el del homínido primitivo, con dedos laterales más cortos, un pulgar más fuerte, un arco no tan pronunciado y un talón estrecho.

De ahí que una de las hipótesis sugiera que se trató de Graecopithecus freybergi, un homínido extinto cuyos restos fueron encontrados en Grecia en 1944. El equipo explica que no es posible descartar este escenario, toda vez que hace 6 millones de años, la isla de Creta se encontraba unida a la Grecia continental.

De confirmarse los resultados del estudio publicado en Scientific Reports, podría comenzar a esbozarse una explicación distinta a la que considera África como la cuna de la humanidad, desde donde nuestra especie comenzó una expansión posterior a Eurasia.

elsiglo