La bolsa de Seúl retrocedió hoy con fuerza y su principal indicador, el Kospi, perdió un 1,89 % en una jornada marcada por la incertidumbre que generan la posible suspensión de pagos que encara la Administración estadounidense y la crisis de las inmobiliarias chinas.
El referencial surcoreano Kospi bajó 57,01 puntos hasta situarse en 2.962,17 enteros, mientras que el índice tecnológico Kosdaq cayó 27,83 puntos o un 2,83 %, hasta quedar en 955,37 unidades.
Seúl completó hoy una sesión para olvidar, con el Kospi y el Kosdaq perdiendo las cotas de los 3.000 y los 1.000 puntos, respectivamente, y con el primero de ellos cerrando en su peor nivel en casi siete meses.
El bloqueo político para tratar de alzar el techo de gasto y evitar que el Gobierno estadounidense se quede sin liquidez, unido al impago en que ha incurrido otra gran inmobiliaria china, Fantasia, generaron inquietud en el parqué.
Inversores extranjeros y minoristas fueron vendedores netos y se deshicieron de un neto combinado de unos 980.000 millones de wones (unos 825 millones de dólares), por lo que la mayoría de valores surcoreanos acabaron retrocediendo.
La ficha que mayor influencia tiene sobre el selectivo surcoreano, el gigante tecnológico Samsung Electronics; cedió un 1,37 %, mientras que el segundo mayor fabricante mundial de chips de memoria, SK hynix, se dejó un 2,1 %.
En el sector biofarmacéutico, Samsung Biologics retrocedió un importante 7,2 %, y su competidor Celltrion se precipitó un 12,11 %.
El operador del mayor buscador de internet en Corea del Sur, Naver, cerró un 3,01 % a la baja; y la corporación detrás de la aplicación de mensajería más popular del país, Kakao, se dejó un 4,29 %.
Por su parte, Hyundai Motor, el mayor fabricante de vehículos del país asiático, cerró plano.
