Ocampo (Nasa) agradece el papel de España para la misión de asteroides Lucy

La gerente de programas científicos de la NASA, Adriana Ocampo, destacó y agradeció hoy el papel que juega España para optimizar el retorno científico de la misión Lucy, que será la primera en visitar asteroides troyanos, los vestigios de la formación planetaria del Sistema Solar.

La colombiana Ocampo de visita en España dijo, en rueda de prensa, que la misión se lanzará en 15 de octubre desde Estados Unidos, pero el día uno de ese mes se producirá un «evento astronómico muy único», que es la ocultación de uno de los ocho asteroides que estudiará Lucy.

Polymele, un asteroide troyano de Júpiter, cruzará frente a una estrella muy brillante y su sombra caerá proyectada de norte a sur de España.

Serán solo dos segundos, y gracias a una «armada de telescopios móviles», en España se tratará de captar ese momento. «Va a ser algo histórico si se llega a capturar», pues se podrá saber mejor el tamaño y forma de Polymele, el asteroide más pequeño que sobrevolará Lucy, previsiblemente en 2027.

De esta forma, «España nos está ayudando a optimizar el retorno científico» de la misión por lo que -subrayó- «estamos muy agradecidos, la NASA y Estados Unidos, a esa gran colaboración».

Ocampo manifestó su agradecimiento a «toda la comunidad científica española».

Además, recordó que la NASA tiene en Robledo de Chavela (Madrid) antenas de su Red del Espacio Profundo, que son «clave», pues en muchas ocasiones, durante los casi doce años que durará la misión de Lucy, esta instalación será la primera en recoger sus señales para enviarlas al equipo científico de Estados Unidos.

Lucy estudiará entre 2025 y 2033 ocho asteroides troyanos, que son pequeños remanentes de más de 4.000 millones de años del Sistema Solar primitivo, como fósiles de la formación y evolución de los planetas.

Estos asteroides «creemos que han jugado un papel clave en la formación de los planetas gigantes gaseosos», comentó la científica, que se refirió a ellos como «la piedra Rosetta que nos van a ayudar a entender nuestros orígenes planetarios» y, «quizás también, cómo la vida llegó a nuestro planeta».

Ocampo destacó que esta misión es «algo único, histórico para la Humanidad», porque se centrará en un área del Sistema Solar nunca antes explorada.

Lucy lleva su nombre el honor del mejor ejemplar fósil que se conserva de Australopithecus Afarensis, de más de tres millones de años, descubierto en 1974 en Etiopía.

Tal y como Lucy proporcionó conocimientos sobre los orígenes del hombre como especie, esta misión lo hará sobre «nuestros orígenes planetarios», señaló.

Entre otros aspectos de la misión, la experta resaltó sus paneles solares, que serán su fuente principal de energía, una investigación que ha ayudado a la eficiencia de las células solares en la Tierra.

Este es un ejemplo de los beneficios que las nuevas tecnologías desarrolladas para explorar el Universo proporcionan, «ayudando a tener una vida mejor como sociedad».

Esta será además la primera vez que una misión espacial visite tantos destinos en órbitas independientes alrededor del Sol y la nave -reseñó- tiene capacidad para mantener su trayectoria durante unos dos millones de años.

Ocampo indicó que la sonda lleva una placa con mensajes de esperanza y paz y «de lo que somos como especie», que fueron escritos por poetas de diversas partes del mundo.

«Un mensaje para el futuro de nuestra especie, para esos arqueólogos espaciales que, eventualmente, un día puedan buscar artefactos» de misiones pasadas».

EFE