Comunidad eclesiástica San Pablo Apóstol rindió homenaje a su fundador

En el marco de la conmemoración de la muerte del padre Juan José Zugarramundi, párroco fundador de la iglesia ubicada en la comunidad de 23 de Enero, feligreses y el actual presbítero de la localidad realizaron diversas actividades litúrgicas en el templo religioso San Pablo Apóstol.

Con respecto al tema, el padre Juan Carlos Arango comentó, “esta semana estuvimos realizando actividades eclesiásticas con motivo del cumplimiento del mes de la sentida desaparición física del párroco Juan José Zugarramundi, quien estuvo en esta localidad eclesiástica por más de 50 años, terminando su labor en la comunidad de Santa Rita”.

Asimismo, el padre Arango destacó que con esta actividad han querido resaltar las labores de este personaje eclesiástico que vino proveniente de España a fundar la fe en el barrio y en varias comunidades de Maracay.

En este sentido, Arango destacó, “siempre he pensado que cuando la labor de un sacerdote es tan grande mucha gente no la conoce y eso es lo queremos que la comunidad conozca las obras de como Dios obró en este hombre”.

De esta manera destacó que es importante que este tipo de obras y logros sean publicados y sea del conocimiento público, por tener tanta importancia para las comunidades, por el trabajo de beneplácito que este padre realizó.

Antes tal afirmación, el presbítero indicó, “muchas veces cuando el sacerdote comete algún error rápidamente se hace viral en las redes, pero cuando la obra como por ejemplo de este hombre que trabajó infatigablemente al servicio de la comunidad y de los más necesitados, en muchas ocasiones no salen a la luz pública”.

Por otro lado se pudo conocer que el sacerdote Juan José Zugarramundi, fue el fundador de varias instituciones educativas, casa talleres, dedicado a la formación y el crecimiento de los jóvenes que eran desechados por la sociedad, ayudando a familias más necesitadas con alimentos, vestido, medicinas, entre otros.

Por su parte, Elsy Palacios comentó, “cuando era niña, él se encargó de mi crianza y convivir con un santo es lo más grande de este mundo, nuestro padre Juan José, fue, será, y es un santo por siempre. Era un enamorado de la educación, atendió a los enfermos hasta su último momento”.

Las actividades litúrgicas comenzaron a partir del sábado 4 de septiembre y se extendieron hasta el día de ayer entre cantos, lecturas, reflexiones, con la presencia de los fieles de la parroquia 23 de Enero y zonas aledañas.

JOSÉ CARPIO G. | elsiglo
fotos | JOEL ZAPATA