Antisociales atacaron sede policial en Magdaleno

Unos 20 delincuentes fuertemente armados atacaron a tiros la estación de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) de Magdaleno, situación que hizo vivir momentos de tensión a los habitantes de esa población del municipio Zamora del estado Aragua.

La sede de la Policía Nacional Bolivariana fue atacada por un grupo armado

El ataque de los antisociales comenzó a las 5:00 de la madrugada de ayer y se prolongó por unas cuatro horas aproximadamente.

Los delincuentes que atacaron la estación policial de Magdaleno -ubicada prácticamente en el casco central de esa localidad- son integrantes, al parecer, del grupo hamponil que dirige Wilmer José Pérez Castillo, alías “Wilmer Guayabal”.

La acción de los sospechosos, en un primer momento, fue repelida por los funcionarios policiales apostados en esa sede.

Luego de un intenso intercambio de disparos cerca de 20 minutos, los uniformados que hicieron frente a los individuos, recibieron apoyo de efectivos de las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES), de la Dirección de Inteligencia Estratégica (DIE) y de la Policía Bolivariana de Aragua (PBA).

Ante la presencia de más funcionarios, los hampones no tuvieron otra determinación que escapar del sitio, lo que permitió que las fuerzas policiales se desplegaran por toda la población.

Durante el ataque no hubo heridos y tampoco bajas que lamentar, se informó extraoficialmente. Tampoco se registraron detenciones.

Los sujetos al servicio de “Wilmer Guayabal” al parecer planificaron el ataque en el Club “Hermanos Infante”, se informó a los reporteros; en ese centro social nocturno estuvieron hasta las 3:00 de la madrugada, las comisiones incautaron en ese lugar un mapa el cual elaboraron en una lona, marcando puntos estratégicos; el objetivo, como un primer paso, era tomar la estación policial.

Los efectivos de las FAES, DIE y PNB se mantuvieron hasta horas de la noche rastreando a los delincuentes que atacaron a tiros la estación policial de Magdaleno.

EL MAPA

El grupo que atacó ayer la estación policial de Magdaleno tenía como objetivo tomar la instalación, como una muestra de su “poderío” a las nuevas autoridades que recibieron la responsabilidad de administrar esa sede y por supuesto el orden ciudadano en esa localidad.

En el mapa que incautaron las comisiones mixtas, los malvivientes hicieron una representación gráfica de puntos estratégicos para ejecutar el ataque. Delimitaron los sitios donde ubicarse y las áreas a tomar al momento de replegarse.

Al parecer la estación policial no era el único objetivo de los atacantes. Se presume que de haber logrado tomar la sede de la PNB, sus intenciones era controlar el casco central de Magdaleno.

PELIGROSOS ANTISOCIALES

Por versiones policiales, en los últimos dos años se ha conocido que alias “Wilmer Guayabal” ha conformado un grupo de antisociales muy peligrosos, dispuestos a asesinar por dinero o simplemente por gusto.

En el 2019 su banda estaba integrada por diez sujetos, pero actualmente tiene una “nómina” de unos 50 elementos, entre ellos, menores de edad.

Alias “Wilmer Guayabal” se ha hecho rodear de individuos que tienen prontuarios policiales por los delitos de robo, hurto, homicidio, extorsión y secuestro.

Los organismos policiales del estado Aragua han intentado atraparlo, pero en esos procedimientos ha logrado evadir el brazo de la ley.

Entre los secuaces de Pérez Castillo, los cuerpos policiales siempre mencionan a alias “Darwito”, así como a “El Kily”, “Winder”, “Juancho”, “Cesita”, “Romero”, “Agny” y “Poporio”. Se presume que algunos de ellos pudiera ser el “heredero” como cabecilla de la banda, en una hipotética caída de “Wilmer Guayabal”, aunque algunos hoy en día están radicados en Cúcuta, Colombia, y de otros se ha dicho incluso, han muerto.

REGISTROS

Entre los homicidios acreditados a los integrantes de la banda de “Wilmer Guayabal” se encuentra el caso del detective José Feliciano Rujano Rodríguez, adscrito a la Dirección Inmediata de Caracas y el inspector Elver José García Guerra, en hecho ocurrido en agosto del 2020. Sucedió cuando los funcionarios se trasladaban en un camión tipo cava y fueron sorprendidos por una alcabala improvisada que montaron los delincuentes.

De igual manera, el crimen del oficial Rafael Augusto Rodríguez Gil, uniformado de la Policía Municipal de San Diego del estado Carabobo, en octubre del 2019.

También otro caso del grupo delictivo fue la muerte del supervisor agregado (PNB), Jesús Enrique Troconi Fernández, y del ingeniero Nicheson Orlando Castro Duarte, el 29 de julio de este año.

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