Kenia aumenta su población de elefantes de sabana, la cuarta mayor del mundo

La población de elefantes de Kenia ha aumentado hasta 36.280 ejemplares y se ha convertido en la cuarta más grande del mundo, tras Zimbabue, Botsuana y Tanzania, informó hoy el Servicio de Conservación de la Vida Salvaje keniano (KWS).

African elephants (Loxodonta africana) at a waterhole – remote camera. Masai Mara National Reserve, Kenya.

El dato aparece en el informe del primer censo nacional de animales salvajes del país africano, que atraen a turistas de todo el mundo y representan una importante fuente de ingresos económicos.

Según el documento del censo, cuya elaboración empezó en mayo pasado, la población nacional de elefantes ha crecido de 32.214 animales en 2014 a los actuales 36.200 animales, lo que constituye un aumento de la población del 12 % en siete años.

El año 2014 marcó el apogeo de la caza furtiva en Kenia, que perjudicó mucho a los paquidermos. La población se redujo de 35.588 elefantes en 2012 a 32.214 en 2014, de acuerdo con el KWS.

“Desde entonces (2014), la población de elefantes ha aumentado. Por tanto, los esfuerzos realizados por el Gobierno para frenar La caza furtiva de elefantes en diferentes ecosistemas sigue siendo productiva”, subraya el informe.

La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) advirtió en marzo pasado de que la caza furtiva y la importante pérdida de su hábitat a causa de las actividades humanas estaba causando estragos entre la población de elefantes de África.

El número de elefantes africanos de sabana disminuyó en un 60 % en el último medio siglo, según la organización, por lo que ese animal está en la categoría de especies “en peligro”, según la UICN.

“La reducción de pérdidas en términos de elefantes, rinocerontes y otras especies en peligro de extinción se debe al gran trabajo que el KWS (…) está haciendo para garantizar que el patrimonio (de vida silvestre) esté protegido”, afirmó el presidente de Kenia, Uhuru Kenyatta, en un comunicado.

En 2020, Kenia marcó un hito en la conservación al registrar cero muertes de rinocerontes, como resultado de un enfoque multisectorial de la seguridad colaborativa para combatir la caza furtiva.

El censo, que cubrió el 59 % de la masa terrestre de Kenia, contabilizó más de 30 especies de mamíferos, aves y especies marinas en varios ecosistemas.

Entre las especies más famosas destacan también los leones (2.589), los rinocerontes negros (897), los rinocerontes blancos (842), los búfalos (41.659) o los guepardos (1.160), si bien no se divulgaron cifras comparativas.

“La vida silvestre es nuestro patrimonio. Este es el legado de nuestros hijos y es importante para nosotros saber lo que tenemos para estar mejor informados sobre las políticas y también sobre las acciones necesarias” para su conservación, agregó Kenyatta.

La rica vida silvestre de Kenia es uno de los pilares económicos del país, que, sin embargo, no termina de optimizar sus beneficios debido a un conocimiento inadecuado del estado de las poblaciones de animales salvajes, pues faltan datos de muchas especies.

EFE