Muere otro venezolano en cruce fronterizo entre Bolivia y Chile

Las autoridades sostienen que en su travesía por el altiplano, los migrantes son víctimas de bandas dedicadas al tráfico de personas. Los delincuentes cobran al menos 200 dólares para ingresarlos ilegalmente.

Un ciudadano venezolano murió cuando intentaba ingresar desde Bolivia a Chile de manera irregular cerca del poblado fronterizo de Colchane, en Tarapacá, una región remota y fría del altiplano donde ha vuelto a aumentar la migración por pasos clandestinos, informaron este lunes autoridades locales.

El venezolano Édgar Molina, de 56 años de edad, murió tras perder el conocimiento cuando cruzaba junto a su esposa por el inhóspito altiplano, a más de 3.600 metros de altitud, desde Bolivia hacia Chile. La pareja cruzaba por un paso clandestino, a unos tres kilómetros del poblado de Colchane, según información proporcionada por la alcaldía de esta localidad a la AFP.

Molina se convierte en el venezolano número once que muere este año al intentar ingresar a Chile irregularmente por el cruce fronterizo de Colchane. Esta es una pequeña población aymara de unos 2.000 habitantes ubicada a 3.650 metros de altitud y que tomó relevancia en febrero cuando colapsó por la llegada de miles de migrantes.

«Lamento el fallecimiento número once de un inmigrante venezolano en estas circunstancias en el cruce fronterizo», dijo Javier García, alcalde de la localidad.

El deceso de Molina se produce en medio de un aumento de migrantes en este cruce hacia Chile, donde ingresan de manera clandestina porque el país tiene las fronteras cerradas para todos aquellos que no sean chilenos o residentes. Además, en el caso de los venezolanos, Chile exige visa.

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