Estados Unidos espera recibir esta semana el primer vuelo con ciudadanos de Afganistán que trabajaron para el Ejército -en su mayoría traductores- y que han pedido asilo junto a sus familias, informó este martes la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki.
En su rueda de prensa diaria, Psaki indicó que los primeros beneficiarios del Programa de Visas Especiales de Inmigrantes llegarán “esta semana”.
“Es un paso adelante muy emocionante y será el primero de muchos”, afirmó la portavoz.
El Gobierno estadounidense ha anunciado que acogerá temporalmente en la base militar de Fort Lee, en el estado de Virginia, a unas 2.500 personas procedentes del país asiático mientras terminan los trámites sus visados especiales.
Se trata principalmente de traductores o contratistas de las tropas estadounidenses y cuya vida corre peligro tras la retirada del Ejército de EE.UU.
El grupo que llegará al país norteamericano es una pequeña porción de los casi 20.000 afganos que han mostrado su intención de solicitar la visa, especialmente tras el avance de los talibanes.
Poco después de su llegada, una vez que se complete el requisito de chequeo médico, “su estado migratorio se ajustará” para que puedan recibir los beneficios de los refugiados, según ha anticipado a los periodistas Ned Price, portavoz del Departamento de Estado.
Representantes de los dos partidos del Congreso ya han urgido con anterioridad al presidente Joe Biden para que ofrezca con rapidez asentamiento en territorio estadounidense a todos los que han colaborado con las tropas, ya que el proceso burocrático suele alargarse varios meses.
Decenas de miles de afganos han trabajado para EE.UU., la OTAN o las embajadas occidentales en Afganistán durante las dos últimas décadas.
La urgencia por la evacuación coincide con la última fase de retirada de los militares estadounidenses, un movimiento que dio a los talibanes una ventaja en el campo de batalla contra las fuerzas afganas.
Desde el pasado el 1 de mayo, cuando las fuerzas estadounidenses y de la OTAN iniciaron su proceso de retirada, los talibanes han logrado rápidos avances territoriales y capturado más de 130 distritos afganos en todo el país, principalmente en el norte.
